París – El retorno del costarricense Keylor Navas a la portería del París Saint-Germain tendrá que esperar, puesto que el exjugador del Real Madrid se ha fijado como objetivo regresar al cien por ciento para la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones contra el FC Barcelona el próximo día 16.
Lesionado el 22 de enero pasado contra el Montpellier, por un golpe en el abdomen, el guardameta de 34 años debía haber regresado el pasado fin de semana contra el Nimes, pero los días previos sintió una molestia en los abductores, por lo que el club optó por la prudencia.
Y parece que esa va a ser la consigna en los próximos días con el portero, puesto que el club otorga mucha importancia a contar con su experiencia bajo los palos para el decisivo duelo contra el Barça.
Navas no estará en el «clásico» del domingo contra el Olympique de Marsella y todo apunta a que tampoco volverá el miércoles en Copa de Francia frente al Caen.
El costarricense no volverá a defender los palos parisienses antes del partido frente al Niza del fin de semana siguiente, para rodarse algo antes de afrontar al Barça.
Entretanto, el español Sergio Rico seguirá como meta titular, aunque sus prestaciones no terminan de convencer a orillas del Sena.
El exportero del Sevilla no ha cometido errores importantes, pero está lejos de aportar la seguridad que lleva Navas desde que llegó a París a principios de la pasada temporada.
Rico, de 27 años, estaba a punto de abandonar el PSG al final de la pasada temporada, cuando se acababa su cesión desde el Sevilla, sin que el club tuviera previsto ejercer su opción de compra.
Pero la irrupción de la pandemia y la bajada del precio de venta, que se situó en unos 6 millones de euros, hizo que la dirección parisiense apostara por mantenerle como número 2 de Navas.
Sus prestaciones en el tramo final de la pasada Liga de Campeones en Lisboa, donde sustituyó al costarricense contra el Atalanta y el Leipzig, fueron correctas.
Además, su relación con Navas es muy buena, tanto en el terreno deportivo como fuera, donde sus esposas han trabado una buena amistad. EFE