Tegucigalpa.- La presidenta de la Asociación de Jueces y Magistrados, Ana Cardona, ha hecho públicas graves acusaciones de amenazas y represalias en su contra, señalando directamente a círculos cercanos a la presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Rebeca Raquel Obando.
En una rueda de prensa que tuvo lugar en la sede judicial, Cardona comparó la situación con una metáfora impactante: «A la diosa Temis no solo quieren ponerle una venda en los ojos sino también en la boca». Con estas palabras, denunció los intentos de silenciar su voz y coartar su labor en defensa de los principios fundamentales del sistema judicial hondureño.
«He sido perseguida por defender principios como la independencia e inamovilidad de jueces. Sé que estas declaraciones me pueden traer consecuencias, pero me apego a los principios», afirmó Cardona visiblemente afectada por la situación.
La coordinadora de los Juzgados de Familia de la Corte Suprema de Justicia lamentó la falta de respeto por los principios legales y la voluntad de silenciarla a toda costa. Además, hizo hincapié en las amenazas recibidas y las represalias que afectan no solo a ella sino también a la ciudadanía y a la niñez, al ser excluida de mesas técnicas y capacitaciones.
Entre las intimidaciones denunciadas, Cardona mencionó la posibilidad de ser transferida de juzgado y enviada a la ciudad de La Ceiba, a pesar de tener su vida familiar establecida en su ubicación actual y ser madre de dos menores hijos.
«Solamente por defender los derechos de los jueces y magistrados de Honduras y por defender principios que son tan importantes en un estado de derecho como lo es la independencia judicial y la inamovilidad de los jueces», enfatizó Cardona.
La preocupación por su seguridad y la de su familia fue palpable en sus declaraciones, donde expresó temor por posibles represalias incluso por su vida. A pesar de haber interpuesto denuncias ante instancias como el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) y la Embajada de Estados Unidos, Cardona siente que su situación sigue siendo vulnerable.
«Las amenazas vienen por allegados a la presidenta de la Corte y ella lo sabe», concluyó la presidenta de la Asociación de Jueces y Magistrados, destacando la urgencia de abordar esta situación para garantizar la integridad de quienes defienden los principios fundamentales del sistema judicial hondureño.
