La exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, advirtió sobre un notable deterioro político en el país, agravado por una serie de escándalos que han impactado negativamente la imagen del gobierno y la presidenta Xiomara Castro.
Castellanos destacó que el último mes ha sido particularmente convulso, con acontecimientos de gran relevancia política que han tenido repercusión internacional. Entre ellos, mencionó las controversias generadas por la reunión entre el exministro de Defensa hondureño y su homólogo venezolano, Vladimir Padrino, lo que despertó críticas en la comunidad diplomática, incluyendo a la embajadora de Estados Unidos, Laura Dogu.
En paralelo, Castellanos señaló que el gobierno hondureño aprovechó esta coyuntura para denunciar el tratado de extradición con Estados Unidos, lo que calificó como un movimiento estratégico en medio de la actual agitación política.
Además, la exrectora subrayó el impacto del reciente video que vincula al exsecretario del Congreso Nacional, Carlos Zelaya Rosales, con actividades de narcotráfico, un escándalo que ha afectado directamente al gobierno, dañando la reputación de la presidenta Castro y del Partido Libertad y Refundación (Libre).
Castellanos también indicó que el fallo de inconstitucionalidad sobre las Zonas de Desarrollo Económico (ZEDEs) podría estar siendo utilizado como una distracción para desviar la atención de estos problemas internos.
En el ámbito de seguridad, Castellanos concluyó que el país sigue enfrentando graves retos, como la extorsión, y señaló que «hay mucho trabajo por delante» en esta materia.
