Información clasificada en el juicio de JOH podría poner en riesgo la seguridad de EE. UU., según experta

0
387

Tegucigalpa.- La analista, abogada e investigadora Carolina Meléndez ha revelado preocupaciones sobre la posibilidad de que cierta información clasificada pueda representar un riesgo para la seguridad nacional de Estados Unidos durante el juicio contra el expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández.

Meléndez explicó que, según la Ley de Procedimientos de Información Clasificada (CIPA), los casos criminales que involucran información sensible están sujetos a regulaciones específicas. En este contexto, señaló que existe la posibilidad de que durante el proceso judicial surjan detalles que puedan comprometer la seguridad del país.

La investigadora destacó el papel que Hernández desempeñó como presidente de Honduras, señalando que tenía la autoridad para establecer relaciones y negociaciones con agencias federales estadounidenses como la CIA, la DEA y el FBI. Sugirió que el expresidente podría intentar utilizar esta información en su defensa durante el juicio.

Sin embargo, Meléndez subrayó que la ley CIPA establece estrictas regulaciones sobre la divulgación de información clasificada, lo que significa que no se puede discutir en el juicio a menos que haya acuerdos entre la Fiscalía, la defensa y el juez sobre qué información se puede revelar y qué no.

La experta detalló que la ley CIPA tiene diversas etapas, y en la fase actual, solo la defensa y la Fiscalía participan en la discusión sobre la información clasificada. Además, señaló que la información está en manos de oficiales certificados que han jurado protegerla.

En cuanto al acceso a la información, Meléndez enfatizó que ni la defensa de Juan Orlando Hernández ni el propio exmandatario tienen acceso directo a ella. Solo una representante legal designada por Hernández, Sabrina Shroff, tiene acceso, con la responsabilidad de proteger la información para evitar poner en riesgo la seguridad nacional de Estados Unidos.

El desarrollo de este caso continuará siendo vigilado de cerca, ya que plantea importantes cuestiones legales y de seguridad nacional tanto para Honduras como para Estados Unidos.