Tegucigalpa.- Funcionarios de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) detuvieron a tres presuntos miembros de una banda criminal en poder de armas de fuego, vehículos y 1.7 millones de lempiras.
Segun información, estas personas se dedican a cometer secuestros, sicariato y venta de droga en el Distrito Central y otros municipios de Francisco Morazán.
Esta importante acción operativa fue ejecutada, por la Unidad Nacional Antisecuestros (UNAS) equipo élite de la Policía Nacional, adscrito a la DPI, que tiene como finalidad dar respuesta a delitos de alto impacto.
La UNAS, reportó la detención de los tres individuos mediante allanamiento de morada con autorización judicial en diferentes sectores del Distrito Central.
Entre los detenidos está alias «Mango», de oficio motorista, de 35 años, originario y residente en la zona #2, de la colonia Cerro Grande de Tegucigalpa.
Asimismo, un comerciante de 28 años, originario y residente en la zona #4, de la colonia Cerro Grande de Tegucigalpa.
Y el tercer detenido es un comerciante de 36 años, originario y residente en la aldea San Matías del Distrito Central.
A ellos, se les requirió en atención a un auto motivado de detención preventiva con el beneplácito de la Fiscalía, por suponerlos responsables de los delitos de secuestro agravado, lavado de activos y tenencia ilegal de arma de fuego de uso comercial.
Entre lo decomisado a los tres detenidos figura: un vehículo tipo camioneta, marca Honda, modelo CRV, color gris; un vehículo tipo camioneta, marca Honda, modelo CRV, color azul; dos armas de fuego tipo pistola con su respectivo cargador; 10 teléfonos celulares de diferente marca y modelo; 1 mil 797 mil 500 lempiras en efectivo en billetes de diferentes denominaciones; aparatos electrónicos y documentos varios.
Las investigaciones señalan que los miembros de esta banda delictiva en fecha 12 de agosto del presente año, secuestraron a un joven capitalino, por quien exigían 15 millones de lempiras a cambio de dejarlo en libertad.
Con el avance de las investigaciones se logró identificar a los ahora arrestados y una fosa clandestina en donde se encuentra un cuerpo sin vida.
Los agentes presumen que se trata del joven secuestrado, por lo que se coordina la exhumación en las próximas horas.
Cabe destacar que, los familiares no pagaron ningún rescate y no han vuelto a ser contactados por los secuestradores.
En ese sentido, la DPI continúa con las investigaciones a fin de esclarecer los hechos y paradero de la víctima. Además, trabaja en la captura de otros miembros de la organización delictiva.
