Tegucigalpa – El reconocido influencer japonés Shin Fujiyama, conocido cariñosamente como el “japonés más catracho”, ha sido designado Embajador de la Educación en Honduras por su destacada labor en beneficio de la infancia y la educación en comunidades vulnerables.
Desde 2007, Fujiyama ha liderado iniciativas que han transformado la vida de miles de niños hondureños. Ha adoptado a 30 niños y supervisado la construcción y restauración de más de 70 centros educativos, con la ambiciosa meta de renovar mil escuelas en todo el país.
El Ministerio de Educación destacó su “invaluable labor y amor por Honduras” al anunciar este nombramiento honorífico. Aunque Fujiyama no pudo asistir a la ceremonia realizada el sábado, expresó su agradecimiento a través de redes sociales, donde reafirmó su compromiso con la educación y el desarrollo de Honduras.
En el mismo acto, también fue reconocido Santos Arzú Quioto, un maestro de arte contemporáneo, economista, filósofo y pedagogo, con 40 años dedicados a la enseñanza. Las autoridades resaltaron su “calidad humana y profesional”, calificándolo como un ejemplo en el ámbito educativo.
Ambos embajadores son símbolos de compromiso con el futuro de Honduras, promoviendo la educación como herramienta para el cambio y el desarrollo.
