Tegucigalpa. Los incendios forestales que afectan diversas regiones de Honduras han destruido este año 1.063 hectáreas, informó este miércoles a Efe una fuente del Instituto hondureño de Conservación Forestal (ICF).
Entre enero y hoy se han registrado 31 incendios en el país, un 84 % menos a las 194 quemas del mismo periodo del año pasado, indicó la fuente.
El 87 % de los incendios ocurrieron en áreas privadas, donde se destruyeron 1.059 hectáreas, lo que supone el 99,6 % del total del área afectada, agregó.
El portavoz del ICF señaló que el departamento de Gracias a Dios, fronterizo con Nicaragua, con 1.020 hectáreas arrasadas por ocho quemas, es el que más bosques ha perdido este año, mientras que el que más fuegos registró con 14, que destruyeron 27 hectáreas, es Francisco Morazán, donde se localiza Tegucigalpa, la capital.
Un total de 71.850 hectáreas de bosques y pasto fueron destruidas en 1.162 incendios registrados en Honduras en 2019, según cifras del Instituto de Conservación Forestal.
El director del ICF, Mario Martínez, destacó en la víspera la necesidad de incidir en la educación sobre el valor de los bosques y el agua como una herramienta para evitar los incendios en el país.
«Es importante que más sectores de la sociedad se unan para enfrentar un fenómeno como este”, subrayó Martínez, quien señaló además que esa institución ha solicitado al Parlamento aumentar las penas contra las personas que provocan fuegos.
Más del 90 % de los incendios, según las autoridades hondureñas, son causados por el hombre, porque todavía no ha sabido controlar el fuego y lo está llevando a las montañas.
Muchos campesinos utilizan la quema para limpiar predios para cultivos, pero muchas veces no saben controlarlo y por eso se originan los incendios forestales, según organizaciones medioambientales y el Cuerpo de Bomberos de Honduras.
La destrucción del bosque ha mermado el caudal de agua del territorio hondureño, que además figura en el mundo como uno de los países más vulnerables ante los desastres naturales y sufre la peor sequía de los últimos años.
Entre 2011 y 2019, el país centroamericano registró alrededor de 9.619 incendios forestales que destruyeron un total de 553.990 hectáreas de bosques.
Honduras, con una extensión de 112.492 kilómetros cuadrados, pierde cada año entre 60.000 y 65.000 hectáreas de bosque por la tala ilegal y los incendios forestales, según fuentes ambientalistas públicas y privadas.
El caudal de agua de muchas fuentes de Honduras, que figura en el mundo como uno de los más vulnerables ante los desastres naturales, según organismos internacionales, ha sido mermado por la destrucción del bosque.