Tegucigalpa.- El criminólogo Gustavo Sánchez estimó este domingo que al frenar la corrupción en los niveles bajos de las cárceles causaría un impacto positivo en el control de estos sitios que, a causa de la ingobernabilidad imperante, fueron intervenidos, por segunda ocasión durante el mandato de la presidente Xiomara Castro.
Sánchez dijo que a nivel nacional algunos custodios y del personal administrativo se prestan para facilitar el ingreso de armas, teléfonos celulares, entre otros, por lo que es un factor que se debe estudiar las causas del por qué se da esto.
Ya sea porque estas personas ayudan a los reclusos porque están bajo amenazas o porque son amantes del dinero fácil, es necesaria la reingeniería penitenciaria porque “de nada serviría que llegue una interventora y sigan las mismas personas, y según el analista, esta medida no es cosa del otro mundo.
“Solo es de poner ahí, orden, honestidad. Las personas que vayan a poner ahí, de verdad cumplan un trabajo”, dijo al resaltar que el trabajo que se necesita para recuperar la gobernabilidad de las cárceles es combatir la corrupción.
Además, sugirió entre otras cosas, ejercer control con las llamadas telefónicas, una labor coordinada entre las instituciones, una labor de inteligencia en los penales, a fin de tener informantes, agentes encubiertos, una modalidad que ha tenido mucho éxito en la Policía norteamericana.
“Una vez que se combata la corrupción en los centros penitenciarios, ya no vamos a tener ese tipo de problemas”, apuntó.
La estrategia para atacar los problemas que existen en los centros penales será anunciada este martes 18 de abril, por la viceministra de Seguridad y recién nombrada como titular de la interventora de las cárceles, Julissa Villanueva.
