Tegucigalpa.- El anuncio de la presidenta Xiomara Castro de enviar una misión de observación y acompañamiento a Venezuela en las próximas elecciones del 28 de julio, donde además aboga por la no injerencia extranjera, ha levantado señalamientos dentro y fuera del país.
Los cuestionamientos apuntan a que este si es un acompañamiento al pueblo venezolano o al régimen de Nicolás Maduro.
El expresidente de la Cámara de Comercio e Industria de Cortés (CCIC), Eduardo Facussé cuestionó la experiencia del Gobierno para acompañar un proceso electoral.
“Pienso en su gobierno no tiene personas con capacidad de avalar fraudes y dictaduras”, expresó el empresario mediante su cuenta en la red social X que agregó que sugiere “enviar a los que supervisaron nuestras elecciones del 2017. Ellos sí han demostrado gran capacidad y experiencia en ese campo”.
Por su parte, el director del Latin American Watch de la Fundación Libertad (Argentina), Agustín Antonetti calificó el envío de la misión hondureña como “una vergüenza internacional”.
“Honduras será la única “democracia” del mundo que va a validar el brutal ataque de la dictadura de Maduro a la oposición. Usted es cómplice”, señala Antonetti.