Tegucigalpa.- El diputado del Partido Libre, Sergio Castellanos, admitió públicamente su voto a favor de la destitución de cuatro magistrados en 2012, José Antonio Gutiérrez Navas, José Francisco Ruiz Gaekel, Gustavo Enrique Bustillo Palma y la magistrada Rosalinda Cruz Sequeira, quienes fueron removidos de sus cargos tras tres fallos de inconstitucionalidad emitidos por la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) en diciembre de 2012.
Castellanos, quien en ese entonces era congresista del Partido Unificación Democrática, se pronunció después de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que declaró a Honduras responsable internacionalmente por la destitución «arbitraria» de los mencionados magistrados.
En sus declaraciones, el diputado contextualizó el contexto político de aquel momento, argumentando que la destitución se justificó bajo la percepción de que los magistrados habían respaldado el golpe de Estado.
Sin embargo, reconoció que esto fue una interpretación errónea, ya que la remoción permitió la consolidación de un poder concentrado en manos del entonces presidente, Juan Orlando Hernández.
«Asumimos nuestra responsabilidad, nos sometemos a la justicia», expresó Castellanos, añadiendo que su acción como diputado fue un error que debe servir de lección para actuar siempre dentro del marco legal. Además, manifestó su disposición para enfrentar cualquier responsabilidad legal que surja de su participación en la destitución de los magistrados.
Estas declaraciones del diputado Castellanos han generado un intenso debate político en Honduras, así como un llamado a la reflexión sobre la necesidad de respetar el estado de derecho y evitar decisiones que puedan socavar la independencia judicial en el país.
