Tegucigalpa – Un laboratorio para procesar cocaína fue desmantelado en un caserío del departamento de Colón, en el Caribe de Honduras, donde además fue hallado un cultivo de unas 20 hectáreas de la misma planta, informó la Policía Nacional.
El hallazgo y desmantelamiento del laboratorio, consistente en tres módulos, se registró en la aldea La Danta, municipio de Iriona, Colón, según el informe oficial.
En la denominada «Operación Cazador», participaron unos 60 miembros de la Dirección Nacional de Policías Antidrogas y de la Fuerza de Tarea Conjunta Xatruch, lo mismo que personal de la Fuerza Aérea Hondureña, indicó la Policía Nacional en un escueto informe.
Un helicóptero de la Policía Nacional y otro de la Fuerza Aérea se sumaron a la logística del personal en tierra que llegó hasta el sitio montañoso donde fueron localizados el laboratorio y la plantación de coca, señaló la misma fuente.
Además, en el lugar fueron halladas dos escopetas y un rifle que se supone eran utilizadas por personas que cuidaban el lugar, que están siendo buscadas por las autoridades.
Los caribeños departamentos de Gracias a Dios, Colón, Atlántida y Cortés, y Santa Bárbara, Copán y Ocotepeque, en el occidente de Honduras, son utilizados como corredor por narcotraficantes que transportan droga hacia Estados Unidos.
En lo que va de 2020 las Fuerzas Armadas han destruido una veintena de pistas clandestinas de aterrizaje, en su mayoría en los departamentos de Colón y Gracias a Dios, este último fronterizo con Nicaragua, que venían siendo utilizadas por narcotraficantes, según registros de la institución castrense.
Gracias a Dios es el segundo departamento más grande de Honduras, el más despoblado, además de pantanoso y de acceso solo por aire, mar o ríos, y donde más ha venido operando desde la segunda mitad del siglo pasado el tráfico de cocaína procedente de América del Sur.
En lo que va de 2020, según las autoridades hondureñas, más de 2.200 kilos de cocaína han sido incautados, algunos que eran transportados en avionetas y otros en lanchas rápidas con motores fuera de borda, mientras que los cultivos de plantaciones para procesar la droga se han venido incrementando en los últimos cuatro años. EFE
