Roma– Tras 95 días de parón forzado a causa del coronavirus, el balón volvió a rodar este viernes en Italia con la vuelta de las semifinales de la Copa entre el Juventus y el Milan, en el silencio de un Allianz Stadium de Turín a puerta cerrada.
Los dos equipos guardaron un minuto de silencio antes del comienzo del encuentro en honor a las más de 34.000 víctimas causadas por el coronavirus en Italia y, a continuación, fue el argentino Paulo Dybala, delantero juventino, quien dio el primer toque al balón.
Juventus y Milan igualaron 1-1 en la ida, disputada a mediados de febrero en San Siro, cuando un penalti marcado por el portugués Cristiano Ronaldo igualó un gol inicial del milanista Ante Rebic, titular también este viernes ante la baja por sanción del sueco Zlatan Ibrahimovic, quien arrastra además problemas musculares
Para este nuevo comienzo de temporada, el Milan saltó al campo con unas camisetas especiales, con la leyenda «Milan Together» en el pecho y un arcoíris en una manga, acompañado por el lema «Irá todo bien», uno de los mensajes de ánimo usados en Italia durante la fase más aguda de la pandemia.
El equipo milanista, entrenado por Stefano Pioli, encara el duelo obligado a sumar un resultado positivo para tener opciones de pasar a la final y lo hace sin poder contar con Ibrahimovic, quien ni siquiera pudo acompañar al equipo a Turín debido a las estrictas normas previstas por el protocolo sanitario.
A la baja del veterano delantero sueco se suman también las del español Samu Castillejo y del francés Theo Hernández, ambos sancionados, y el Milan salió con Donnarumma; Conti, Kjaer, Romagnoli, Calabria; Kessie, Bennacer, Paquetá, Calhanoglu, Bonaventura; Rebic.
El técnico del Juventus, Maurizio Sarri, alineó a Buffon; Danilo, De Ligt, Bonucci, Álex Sandro; Bentancur, Pjanic, Matuidi; Dybala, Ronaldo, Douglas Costa.
El partido fue precedido por un intenso minuto de silencio, con los dos equipos colocados en el centro del campo para homenajear a las víctimas del coronavirus con las luces del Allianz Stadium apagadas.
Junto a ellos y a los árbitros estuvieron un doctor, una enfermera y un colaborador sanitario, invitados por la Liga de la Serie A para simbolizar el esfuerzo realizado por todo el sistema sanitario italiano en la lucha contra el coronavirus. EFE
