Organismos exigen renovación de misión anticorrupción de la OEA en Honduras

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Tegucigalpa, 28 dic (EFE).- El Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) y la Universidad Tecnológica Centroamericana (Unitec) expresaron este sábado su preocupación por una eventual modificación al convenio de creación de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), un ente impulsado por la OEA y cuyo mandato está por expirar.

El CNA indicó que ve con «extrema preocupación» que el Gobierno hondureño y la Organización de Estados Americanos (OEA) planteen «una modificación» al convenio de la Maccih puesto que eso puede representar «la oportunidad que esperan los corruptos para debilitar a este organismo».

La OEA y el Gobierno de Honduras comenzaron ayer en Washington los diálogos formales sobre la segunda etapa de la misión, cuyo mandato expira en enero si el país centroamericano no accede a renovarlo.

El ente hondureño indicó que para fortalecer a la Maccih es necesario crear instrumentos como la Ley de Colaboración eficaz, normativa que serviría para desbaratar las redes de corrupción, y que se deroguen leyes que han servido «a los corruptos para blindarse».

La sociedad civil ha demandado que el convenio de la Maccih, suscrito en enero de 2016, sea renovado sin ninguna modificación, por lo que el CNA considera que «prestar oídos sordos a este pedido es ignorar un legítimo llamado que puede significar la pérdida de importantes avances en la lucha contra la corrupción que anteriormente era algo impensado».

Agregó que, con el apoyo de la Maccih, el Ministerio Público de Honduras ha logrado acusar en los tribunales a «personajes que antes eran intocables, lo que evidencia sus aportes al fortalecimiento al sistema de justicia».

El ente anticorrupción exige que la mesa de diálogo entre el Gobierno hondureño y la OEA tenga «una agenda transparente, que cada punto que se discuta sea informado al pueblo hondureño» y que cualquier acuerdo este a la vista de todos los sectores.

Enfatizó que la Misión de la OEA, que se instaló en abril de 2016 en Tegucigalpa, «no nació como una muestra del Estado de querer combatir la corrupción, sino, como una respuesta a la demanda de la sociedad que se agrupo en la marcha de ´las antorchas´».

«Los corruptos sacan provecho de la pasividad de un pueblo del que se han burlad siempre, pero que les demostró que cuando encienden las luces de la protesta son capaces de ponerlos de rodillas», destaca el CNA.

La Universidad Tecnológica Centroamericana se sumó a las «voces sensatas» que exigen la renovación de la Maccih, ya que Honduras requiere «por más tiempo de un mecanismo con las suficientes facultades para implementar la lucha contra la corrupción y la impunidad de manera exitosa».

Enfatizó que el futuro de Honduras y su pueblo «está en juego» y que «detener el trabajo de la Maccih o debilitar sus funciones significa ignorar el deseo ferviente de un país por un futuro promisorio para su gente».

Honduras vive momentos «sumamente difíciles que exigen aunar esfuerzos para enfrentar otros grandes obstáculos y retos en el camino hacia el desarrollo», añadió.

La Unitec considera que la situación actual del país «es profundamente insatisfactoria».

La situación «nos condena a seguir viviendo niveles de pobreza inaceptables; a seguir recorriendo el camino de la desigualdad y de un crecimiento económico que jamás será suficiente para llevar el bienestar económico y social a todos», agregó.

Como academia, señala la universidad, «no podemos cerrar los ojos ante esta calamidad» y se pronunció a favor de «mecanismos efectivos, sistemáticos y permanentes que nos unan en el camino hacia un mejor país».

Instó a los hondureños a no «darle la espalda a un país que exige un alto al despilfarro y al desvío de los recursos públicos, que exige procesos transparentes en la adjudicación de contratos, que espera trámites judiciales apegados a la ley, así como funcionarios, diputados, jueces, magistrados, fiscales y demás operadores de justicia con una vocación a toda prueba a favor de la ley y la justicia». EFE