Tegucigalpa.- El Ministro de Educación de Honduras, Daniel Sponda, expresó el viernes pasado su intención de migrar del país, al que calificó como una nación sumida en la «cultura de la desesperanza».
Sponda, quien ocupó el cargo durante el gobierno de la presidenta Xiomara Castro, compartió sus pensamientos durante una conferencia, señalando: «Esa cultura de la desesperanza que a veces se transmite a nuestra sociedad creo que la debemos de abandonar. En el país de la desesperanza, todo el mundo se ha querido ir, creo que hasta yo también he pensado en irme».
A pesar de su deseo de partir, el ministro elogió los esfuerzos de la presidenta Castro en la promoción del derecho a la educación como una medida para disuadir a los ciudadanos, especialmente a los jóvenes, de abandonar Honduras en busca de mejores oportunidades en el extranjero.
Sponda también hizo un repaso al año lectivo, destacando que Honduras fue el último país en retomar las actividades presenciales tras la pandemia, lo que, según él, afectó los indicadores educativos en los últimos años.
No obstante, resaltó el logro de Honduras al encontrarse entre los cinco países que mejor manejan la alimentación escolar, un hecho que instó a la población a enorgullecerse.
Además, el funcionario mencionó programas educativos exitosos, como la Red Nacional de Escuelas Agrícolas y la significativa reducción en los índices de reprobación, que se sitúan por debajo del 4 %.
También hizo referencia al Programa Nacional de Alfabetización, que ha beneficiado a más de 140 mil personas.
Sponda concluyó su intervención anunciando ambiciosos planes para erradicar el analfabetismo en Honduras. «Tenemos proyectado declarar, en la primera quincena de diciembre, al primer municipio como 100 % libre de analfabetismo, con la meta de extender esta condición a los 198 restantes el próximo año.
Nuestra aspiración es declarar a Honduras, en 2024, como un país libre de analfabetismo por primera vez en su historia», puntualizó el ministro.
