Tegucigalpa. – En el 203 aniversario de la independencia de
Honduras, la presidenta Xiomara Castro se dirigió al pueblo por medio de una cadena nacional.
Desde el Estadio Chelato Uclés, Castro subrayó que desde su primer día de gobierno y durante los 12 años y 7 meses previos, su administración ha enfrentado lo que describió como una «narcodictadura» que amenazaba la democracia y la soberanía nacional.
«Nuestro compromiso político y social ha sido firme en la defensa de la democracia frente a la injerencia y en la lucha por la autodeterminación de los pueblos para lograr nuestra independencia», afirmó.
Castro indicó que su mensaje ha incomodado a un pequeño grupo acostumbrado a controlar el Estado y la economía para fines personales.
«Nuestras acciones soberanas con transparencia están dirigidas a devolver la dignidad y los derechos que les fueron robados al pueblo», sostuvo.
El discurso también incluyó una reiteración del nombramiento de Rixi Moncada como ministra de Defensa, al igual del discurso de ayer.
Castro destacó que las Fuerzas Armadas tienen el mandato constitucional de garantizar el libre sufragio en las próximas elecciones.
«A pesar de las trampas del bipartidismo, garantizamos elecciones libres y transparentes», afirmó.
Además, Castro hizo un llamado a la clase trabajadora y al pueblo hondureño a seguir luchando por la independencia, la libertad y la justicia.
Reiteró que Honduras no es un negocio, y que se defiende con dignidad y valentía. Aseguró que no se cansará de exigir justicia para los mártires del régimen golpista y prometió que su gobierno no permitirá un nuevo golpe de Estado.
Castro también dejó claro su rechazo a cualquier intento de golpe de Estado, proclamando: «¡Golpes de Estado nunca más!»
En la parte final de su discurso, se solidarizó con la familia del ambientalista Juan López, quien fue asesinado la noche de ayer.
Un discurso bastante similar al del día de ayer, en las afueras de casa presidencial, donde nuevamente Castro hizo referencia al «dichoso» golpe de Estado.
