La directora ejecutiva del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), Gabriela Castellanos, advirtió que el país avanza “dando palos de ciego” hacia las elecciones generales del próximo 30 de noviembre, en medio de una crisis institucional y un clima político marcado por el desorden y la desconfianza.
Durante la presentación de su análisis titulado “Disculpen mi castellano: Manual del caos”, Castellanos describió un panorama de deterioro democrático, en el que las principales instituciones responsables del proceso electoral —el Congreso Nacional, el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el Tribunal de Justicia Electoral (TJE)— operan bajo una lógica de intereses partidarios y falta de coordinación.
“El Congreso juega a la ruleta rusa con decretos quiméricos, el CNE se devora a sí mismo a dentelladas de boicot interno, y el TJE hace equilibrio en la cuerda floja mientras abajo hierven los partidos”, expresó la titular del CNA, aludiendo a la pugna de poder que, según ella, ha entorpecido el desarrollo del proceso electoral.
Castellanos sostuvo que la situación no obedece a casualidades ni errores aislados, sino a lo que denominó “una vieja ingeniería del caos”, diseñada para que el poder político conserve su control a costa de la transparencia democrática.
También alertó sobre el papel de las Fuerzas Armadas, a las que acusó de intentar ampliar su intervención en el proceso electoral. Según dijo, el interés de obtener copias de las actas de cierre de las Juntas Receptoras de Votos (JRV) representaría un intento de construir un conteo paralelo y alterar la confianza ciudadana.
“Es un salto cualitativo: de custodios a contadores. Quien cuenta, narra; y quien narra primero, fabrica realidad y declara ganador a su líder al mediodía”, afirmó Castellanos.
Finalmente, la directora del CNA denunció el presunto uso político del espionaje y la interceptación de comunicaciones, a lo que calificó como una amenaza directa a la democracia hondureña. Concluyó su mensaje con un llamado a la ciudadanía: “La democracia no es metáfora: es lo único que debemos salvar en este incendio. Que nadie robe el día con la excusa de salvar la noche”.
