El argentino Hernán “Tota” Medina está a un paso de ganar el título hondureño con Motagua

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Tegucigalpa.- El entrenador argentino Hernán Medina está a un punto de conseguir que el recuperado Motagua gane su campeonato número 18 en el fútbol de Honduras, después de que el club sufrió cinco derrotas consecutivas que lo relegaron a la quinta posición en el torneo Clausura.

Con buen fútbol y mucha entrega, Motagua, el segundo equipo con mayor afición en Honduras, comenzó a recuperarse luego de la derrota que sufrió en la decimotercera jornada del campeonato, por 1-2, contra Olimpia, su más enconado rival y vecino, en Tegucigalpa, justamente en el debut de Medina como su nuevo timonel.

Las cinco derrotas desanimaron mucho a los directivos, jugadores y aficionados del Motagua, que hasta la séptima jornada tuvo como entrenador al argentino-hondureño Diego Vázquez, quien lo dirigió durante un poco más de ocho años y lo sacó campeón en cinco ocasiones.

Vázquez dejó al Motagua en la tercera posición del Clausura, pero su separación del club fue por la eliminación en la Liga de Campeones de la Concacaf, ante el Seattle Sounders, de Estados Unidos.

Temporalmente, mientras llegaba Hernán Medina como su nuevo entrenador, Motagua fue dirigido por César Obando, que ha venido trabajando con las ligas menores del Club, pero los resultados fueron malos, un triunfo y cuatro derrotas al hilo, a la que se sumó la sufrida contra Olimpia, en el clásico del fútbol hondureño.

Medina tuvo además el inconveniente de retrasar su debut en el Motagua por un problema de salud que lo mantuvo hospitalizado recién llegando de su país a Tegucigalpa.

Un mes y medio después de su debut con derrota ante Olimpia, Medina tiene al Motagua disputando la final del Clausura, en la que el domingo venció de manera contundente por 3-0 al Real España, que dirige el también argentino Héctor Vargas.

Después de la derrota contra Olimpia, Motagua ha tenido una racha de triunfos y, luego de entrar como cuarto al cierre de las dos vueltas regulares del torneo, se impuso en la liguilla al Vida del portugués Fernando Mira, y en semifinales al Olimpia, con el argentino Pablo Lavallén en el banquillo.

Además, Motagua con Medina se ha vuelto un club con una defensa muy sólida, lo que le ha abonado para llegar a la final ante un Real España que, después de haber iniciado el torneo con cuatro derrotas al hilo, lo que le costó el cargo al mexicano Raúl ‘Potro’ Gutiérrez, no paró de ganar y cerró como primero en las dos vueltas regulares del torneo.

Por reglamento, Real España, y Olimpia, los dos primeros de las vueltas regulares, aseguraron su pase a las semifinales, a la que el Motagua llegó con paso firme y el próximo domingo espera rematar cerrando la final contra el club de Héctor Vargas.

Medina logró en poco tiempo consolidar, con éxito, un equipo con muy pocas variantes.

En el juego de ida de la final, el domingo en Tegucigalpa, Motagua incluso pudo haber ganado por un marcador más amplio.

El entrenador del Real España dijo después de la derrota por 3-0 que sufrieron, que abriga la esperanza de una remontada como local en San Pedro Sula, norte hondureño, para conquistar la que sería la decimotercera copa del club en su historia.

Medina, por su parte, en menos de dos meses espera darle al Motagua la número 18, para lo que le basta al menos un empate, incluso podrían ganarla perdiendo por 0-2. EFE