Tegucigalpa, Francisco Morazán – El exministro de Salud, Arturo «Tuky» Bendaña, aseguró que el aborto voluntario es una acción criminal, estoy en contra de eso porque la concepción de un ser humano es una obra divina.
El vicepresidente del Congreso Nacional, Mario Pérez, introdujo hace unos días en la Cámara, una iniciativa denominada “Escudo contra el aborto en Honduras” encaminada a prohibir el aborto voluntario en Honduras, mediante una reforma constitucional.
No obstante, organizaciones feministas han demandado al Congreso desde hace años la legalización del aborto voluntario hasta las 14 semanas de gestación.
Por su parte, el presidente del Legislativo, Mauricio Oliva se reunió esta semana con representantes de iglesias y el Comité Pro-vida, entre otras organizaciones, a fin de socializar el proyecto de ley anti aborto.
En ese sentido, Bendaña, de profesión ginecólogo, explicó que el aborto es “la interrupción del embarazo antes de las 20 semanas de gestación de una manera voluntaria o natural”.
“Pero en lo personal, la interrupción del embarazo de una forma voluntaria es algo que no lo concibo como ser humano y ginecólogo, no está en mis principios la interrupción voluntaria del embarazo y más de una manera criminal”, recalcó.
Señaló que “nosotros no estamos aquí en la tierra para provocar la interrupción del embarazo de una manera criminal, sólo porque a una persona irresponsable se dejó embarazar y nos viene a invitar a los ginecólogos, médicos generales y hasta enfermeras a que le practiquemos la interrupción del embarazo”.
“Esto no está bajo criterios divinos ni humanos, por tanto yo estoy en total acuerdo en que se ponga más rígida la ley en contra del aborto provocado sobre todo de una manera criminal y que se sancione tanto a la persona que lo realiza como a la que busca que se lo practiquen”, subrayó.
“Yo tengo el privilegio divino de ser ginecólogo, estamos para proteger la vida, acompañar a Dios en su creación y dar la noticia que un nuevo ser ha venido al mundo y entregarlo a sus padres”, concluyó.
