Tegucigalpa.- Una denuncia de robo a usuarios del servicio de transporte permitió la captura de dos conductores de bus que supuestamente se dedicaban a extorsionar a su propio gremio en la ciudad de San Pedro Sula, al norte de Honduras.
El reporte de robo terminó en una persecución por parte de la División de Seguridad del Transporte Urbano (DSTU), perteneciente a la Dirección Nacional Anti Maras y Pandillas Contra El Crimen Organizado (Dipampco), que permitió la captura del ciudadano que habría despojado de sus pertenencias a los pasajeros de del transporte público.
El sospechoso de 28 años, originario de San Nicolás, Santa Bárbara, y residente en la aldea El Ocotillo, cuya captura se produjo en la colonia La Guardia, sería el cabecilla de una banda que se dedicaría también a cometer extorsiones. Mientras que la información del otro detenido, del que tampoco se precisó el nombre, está pendiente de verificación.
Cuando los agentes de la Dipampco ingresaron las identificaciones de los detenidos en el Sistema Automatizado para el Control de Casos (Nacmis) de la Policía Nacional, constataron que se trata de dos transportistas que trabajan en el traslado de pasajeros en la ciudad industrial de Honduras.
Las diligencias investigativas apuntan que el primero de los detenidos sería el jefe de una banda delictiva integrada por cuatro personas más, que estaría extorsionando a sus propios compañeros del rubro en el sector de Chamelecón, a quienes les exigen fuertes cantidades de dinero.
Durante el registro que se hizo al vehículo en el que se transportaba el primer sospechoso, un Toyota turismo, color dorado, se encontraron teléfonos celulares, carteras, billeteras, dinero en efectivo, tarjetas de crédito y débito, y prendas de vestir de las víctimas de robo.
Se encontraron, además, varias placas con diferentes numeraciones, siendo esto un indicativo de que la persona requerida las utilizaba para moverse libremente por los sectores de San Pedro Sula para cometer los crímenes.
Los detenidos, junto con la evidencia, fueron remitidos a las instalaciones de la fiscalía de turno para el procedimiento legal correspondiente a la ley, siendo imputados por el presunto delito de robo con violencia e intimidación.