Tegucigalpa. – El cardenal de Honduras, Óscar Andrés Rodríguez, durante la homilía dominical reprochó la explotación laboral en el país después que las autoridades realizarán esta semana el rescate de 35 víctimas.
Esta semana, durante la Operación Libertad ejecutada por el Ministerio Público y la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) se produjo la detención de cinco personas y el rescate de 35 víctimas de explotación laboral.
“Que triste lo que hemos visto esta semana en los medios de comunicación como aquí mismo se practicaba esclavitud laboral, no puede ser”, expresó el jerarca de la Iglesia Católica en Honduras.
De acuerdo a lo informado por agentes asignados al caso, el trabajo policial se realizó en atención a denuncias formales por los delitos de trata de personas en la modalidad de explotación laboral en condiciones de esclavitud o servidumbre.
Fue así que equipos conformados por policías y fiscales, llegaron hasta varios restaurantes ubicados en distintos puntos de la capital, para verificar la información y ejecutar detenciones preventivas contra las personas que supuestamente realizaban la explotación laboral.
En la operación se rescató a 35 víctimas, las cuales fueron llevadas a las instalaciones de la DPI, dónde con apoyo de la Secretaría de Salud los evaluó un psicológico, médicos generales y odontólogos.
La práctica de la explotación laboral fue recriminada por el cardenal hondureño quien aprovechó el espacio para reflexionar sobre otras realidades del país.
Homicidios
Entre otros temas, el también coordinador del Consejo de Cardenales del Vaticano, caviló sobre los homicidios en Honduras y dijo que es un demonio que debemos echar fuera.
“Necesitamos echar un demonio que se ha posicionado de nuestro país, el demonio del homicidio, que tristeza que cada semana hay tantos muertos violentos, eso no viene de Dios”, enfatizó.
A renglón seguido expresó que el crimen y el asesinato en Honduras deben ser eliminados.
Para lograr ese objetivo se debe empezar por la educación en la familia porque muchos de los que hoy militan en pandillas son personas que no tuvieron educación, agregó.
Argumentó que el aborto también es homicidio y reprendió a los políticos que lo utilizan como tema de propaganda política.
“Eso les puede traer los votos de algunas personas que no tienen fe pero los hace cómplices de homicidios”, zanjó.
Migrantes haitianos
Durante la celebración eucarística el cardenal Rodríguez también reflexionó sobre la actual situación que viven miles de migrantes haitianos en busca de una mejor vida.
“Esos centenares de hermanas y hermanos haitianos que pasan por nuestro país buscando algo mejor para ellos porque en su país no hay futuro y no hay esperanza, llegan a una frontera y son acosados como si fueran animales”, arguyó.
Retrató que los migrantes haitianos son atemorizados por agentes migratorios a caballo quienes después los devuelven a su país.
“Que tristeza a qué niveles de deshumanización está llegando la humanidad”, sollozó.
Seguidamente agradeció a toda la diócesis de Danlí por la ayuda a los migrantes haitianos a su paso por Honduras.
Política y bioseguridad
Durante el espacio de reflexión el cardenal hondureño también comentó sobre la política en el país y reiteró el llamado a no descuidar las medidas de bioseguridad.
Sobre el primero dijo que no se puede hacer propaganda política dedicada a mentir y denigrar al contrincante.
“En lugar de promulgar valores se dedican a denigrar al contrincante, insultar y pero todavía a mentir, todo eso es contra la palabra de Dios”, tachó.
Sobre la bioseguridad recordó que la mayoría de los fallecidos a causa de la COVID-19 no se habían vacunado contra el virus.
Al respecto exhortó a la vacunación y a no bajar la guardia con las medidas de bioseguridad.
