La violencia política volvió a golpear el proceso electoral hondureño. A menos de tres meses de las elecciones generales programadas para el 30 de noviembre, el candidato a diputado por el partido Libertad y Refundación (Libre), ingeniero Óscar Bustillo, fue asesinado la noche del martes en su vivienda en el barrio Montecristo, departamento de Yoro.
Según reportes preliminares, hombres armados irrumpieron en la casa del aspirante y lo atacaron a balazos sin mediar palabra. Bustillo fue trasladado de emergencia al Hospital Manuel de Jesús Subirana, pero ingresó sin signos vitales, de acuerdo con medios locales.
Un familiar, que llegó a la Morgue de San Pedro Sula, confirmó el deceso y aseguró desconocer las razones del crimen, además de pedir a las autoridades una investigación exhaustiva.
La Policía Nacional informó que ya se realizan las primeras diligencias y que no se descarta ninguna hipótesis, incluyendo un posible trasfondo político.
El asesinato ha causado consternación en la población y en sectores políticos, al sumarse a una serie de hechos violentos que han marcado la actual campaña, incrementando la preocupación por la seguridad y la transparencia de los próximos comicios.
