Sor María Rosa Leggol quien dedicó su vida ayudar a los demás y sobre todo a los más vulnerables de la población conocida con la protectora de la niñez de honduras, hoy su alma está en el cielo.
El día de hoy viernes se confirmó la muerte de esta servidora del señor a los 93 años de edad, esto debido a que después de ser contagiada con el coronavirus SAR CoV2, quedara grabe de salud.
Para el sacerdote Héctor López de la Parroquia Madre Dolorosa, Sor María Rosa Leggol fue «una mujer de mucha fe, con un amor profundo al Señor y a su cruz, amante de los niños, especialmente de los abandonados. Dispuesta siempre a servir, nunca buscaba su bienestar, solo el de los demás».
Para muchos es un ejemplo a seguir sobre todo en el amor incondicional para los seres más lindos, con un alma limpia y un corazón puro como ser los niños.
