Caracas, 23 ago (EFE).- Dos personas murieron en un presunto enfrentamiento armado con funcionarios de un cuestionado cuerpo policial venezolano dentro de una planta de televisión del occidental estado de Zulia, que hace frontera con Colombia, informó este domingo el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP).
«Asesinan al comunicador popular y trabajador de Guacamaya TV, Andrés Eloy Nieves Zacarías, en la sede del canal en Cabimas, estado Zulia», dijo el SNTP en Twitter.
«El hecho ocurrió durante un operativo de las FAES -Fuerzas de Acciones Especiales de la Policía Nacional Bolivariana de Venezuela- este 21 de agosto. Víctor Torres, hijo del dueño del medio, también fue asesinado», añadió el sindicato.
«FUE UN CRIMEN»
El SNTP también divulgó en Twitter declaraciones del director del medio, Franklin Torres, quien tachó el suceso como un «vil asesinato».
«Esto fue un crimen. Violaron todas las leyes y haremos la denuncia formal porque esto fue un asesinato vil. Todos vimos cuando pusieron hasta armas a los cuerpos», apuntó Torres.
Asimismo, el SNTP señaló que la minuta policial daba cuenta de un presunto enfrentamiento, y que la Policía vinculaba al comunicador con una banda delictiva de la zona.
El Fiscal General de Venezuela, Tarek Saab, dijo en Twitter que designó dos funcionarios regionales para «investigar y sancionar» los hechos, que calificó como «lamentables».
«Los fiscales del Ministerio Público se encuentran en Cabimas desarrollando las siguientes diligencias: identificación de testigos y de vehículos, planimetría, trayectoria y comparación balística, experticia de las armas, trazas telefónicas (e) identificación de funcionarios actuantes», añadió.
UN CUERPO CUESTIONADO
En julio de 2019 la alta comisionada de la ONU para los DD.HH., Michelle Bachelet, recomendó en un informe sobre la situación venezolana disolver las FAES por la presunta vinculación de sus efectivos en ejecuciones extrajudiciales.
Y en septiembre de ese mismo año, Bachelet afirmó en su actualización del informe que su oficina «ha seguido documentando casos de posibles ejecuciones extrajudiciales cometidas por miembros de las FAES en algunas zonas del país», al tiempo que lamentaba que no se hubiera seguido su recomendación de disolver esa fuerza policial.
La expresidenta chilena no fue la primera en apuntar a las FAES por presuntas violaciones a los derechos humanos, pero sí la figura de mayor peso en hacerlo.
RESPALDO PRESIDENCIAL
Sus declaraciones de entonces envalentonaron a la oposición venezolana y a familiares de las víctimas, que denunciaron la represiva política policial del Gobierno de Nicolás Maduro.
Pero el mandatario no solo esquivó las críticas, sino que salió en defensa de las cuestionadas fuerzas especiales, que definió como «una necesidad para la paz» de Venezuela.
«Tienen todo mi apoyo, todo el apoyo institucional, legal (y) constitucional para que desarrollen sus funciones», aseveró Maduro en un acto de graduación de policías en diciembre de 2019, mientras denunciaba la presunta existencia de «una campaña mundial» para eliminar ese cuerpo policial. EFE