París- Miles de personas salieron este sábado a las calles para protestar por la violencia policial, y el racismo contra los negros en París y en diferentes ciudades de Francia pese a las prohibiciones decretadas por las autoridades, sobre todo en nombre de las medidas de protección ante el coronavirus.
En París, entre 1.000 y 2.000 personas se concentraron junto a la plaza de la Concordia a unos cientos de metros de la embajada de Estados Unidos, donde los organizadores pretendían haber celebrado su convocatoria.
Eso fue imposible porque un impresionante cordón policial había bloqueado con vallas y vehículos el acceso a un amplio perímetro de varios kilómetros que incluía buena parte de la avenida de los Campos Elíseos.
La protesta, en la que había sobre todo jóvenes, se desarrolló sin incidentes. Muchos participantes llevaban pancartas alusivas a la muerte en Mineápolis del ciudadano negro estadounidense George Floyd al ser inmovilizado en el suelo por un policía También reivindicaciones contra la discriminación racial.
John, un joven ugandés que está estudiando en París y llevaba una pancarta con el que se ha convertido en el principal lema del movimiento suscitado por la muerte de Floyd («Black lives matter»), explicó a Efe que había acudido a la concentración «para pedir justicia con los negros».
La Prefectura de Policía había advertido desde el viernes de que los proyectos para manifestarse ante la legación diplomática no estaban autorizados por la emergencia sanitaria por la COVID-19, que impide en la capital todas las reuniones de más de 10 personas, pero también por el riesgo de «alteraciones del orden público».
En un comunicado, la Prefectura de Policía recordó los incidentes que se produjeron al término de una manifestación el pasado martes ante el Palacio de Justicia en la que participaron al menos 20.000 personas para denunciar la violencia policial contra los negros por el caso de Adama Traoré, muerto en 2016 en una ciudad de la región de París momentos después de ser arrestado por los gendarmes.
Pese a todo, la Liga de Defensa Negro-Africana y la Brigada contra la Negrofobia habían decidido persistir en su voluntad de concentrarse ante la embajada de EEUU, sin éxito.
Según el portavoz de la segunda de estas organizaciones, Franco Lollia, se trataba de «rendir homenaje a George Floyd», pero también «denunciar el racismo institucional que gangrena Francia».
Buena parte de los manifestantes se trasladaron a continuación al Campo de Marte, a los pies de la torre Eiffel, donde se había organizado una nueva acción.
En ese caso fueron familias de personas que denuncian haber sido víctimas de violencia de la policía y que se han constituido en un colectivo los que habían pedido acudir al Campo de Marte para que se «amplifique el movimiento de solidaridad contra la impunidad de las fuerzas del orden».
En Lyon, a diferencia de lo que ocurrió en París, la manifestación que recorrió algunas de las calles del centro desde la plaza Bellecour (y que reunió a varios miles de personas), sí que había recibido el visto bueno de la Prefectura.
Igualmente hubo desfiles en solidaridad con George Floyd y para denunciar el racismo y la violencia policial en otras ciudades, como Burdeos, Lille o Rennes. EFE