Tegucigalpa.- La matanza de mujeres en Támara donde fallecieron 46 mujeres, ocurrida este martes, “fue planificada de adentro y de afuera”, dijo la viceministra de Seguridad y exjefa de la Comisión Interventora de las cárceles, Julissa Villanueva.
La funcionaria relató escalofriantes detalles de su paso como Interventora de las cárceles de Honduras y expuso que en las mismas funciona una “red de corrupción y tráfico”, que ella, junto a su equipo de colaboradores, estaba permeando pese a las resistencias del sistema, incluida un ala de la Policía Nacional. Su declaración fue brindada en el foro televisivo Frente a Frente.
Igualmente detalló la vorágine de corrupción que sacude la administración de recursos de las cárceles en relación a las compras.
También externó que en operaciones que realizó para intervenir la llamada cárcel de máxima seguridad El Pozo, en Ilama, Santa Bárbara tuvo “escaso y casi nulo acompañamiento”.
Igualmente destacó que si hubo policías que apoyaron las acciones de la Comisión Interventora a los que les llamaban despectivamente los “julissos” otro sector de la Policía y se preguntó sobre el futuro que tendrán dentro de la institución en la que avizoró pueden asignarles temas difíciles.
Dijo que en su conversación con la presidenta Xiomara Castro la gobernante le manifestó su enorme pesar por las víctimas de Támara y “este es un ataque contra mí y contra usted”.
En el caso del ex ministro de Seguridad, Ramón Sabillón, poco a poco los mandos no le hacían caso y quizás era muy lento en su accionar.
Villanueva dijo que estar trabajando en la institución de seguridad es complicado porque “ahí hay fieras” en la Policía Nacional, “hay que cuidarse” de los conspiradores porque amenazan a los mandos mayores con que los denunciarán.
“Nos ocultaban información” de las actividades que se hacían en los centros penales, por eso decidimos crear una unidad de inteligencia en el Instituto Nacional Penitenciario (INP), la cual ahora no sé qué futuro tendrá, indicó la funcionaria.
Julissa Villanueva es la subsecretaria de Seguridad para Asuntos Policiales y continúa en su cargo, ya que la mandataria sólo le quitó el control de la Comisión Interventora para las cárceles, ahora en manos de las Fuerzas Armadas.
Dijo que la salida de la comisión en parte es por la institución policial que no le apoyó y otra parte del crimen organizado, que temía que llegarán al fondo de sus actividades, indicando que mandos policiales no querían que triunfará.
Fuente: Proceso Digital