Tegucigalpa.- La socióloga y exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, manifestó este jueves su respaldo a las declaraciones de la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, afirmando que sus recientes señalamientos sobre la crisis institucional dentro del organismo electoral son serios y deben tomarse con responsabilidad.
Castellanos señaló que las palabras de López no son una muestra de incapacidad, como algunos sectores han querido sugerir, sino una denuncia fundamentada sobre los obstáculos internos que enfrentó el proceso electoral primario del pasado 9 de marzo. “Ella ha hecho de manera responsable una advertencia, una denuncia de la situación real que se vive al interior del Consejo Nacional Electoral”, expresó.
La socióloga denunció que desde dentro del propio CNE se habría buscado entorpecer el desarrollo de las elecciones, incluyendo el bloqueo de correos institucionales desde el sábado 8 de marzo, lo que imposibilitó la circulación de instrucciones clave. También mencionó que el jefe de transporte no respondía llamadas en momentos críticos, lo que contribuyó a un caos logístico durante el fin de semana electoral.
“Todo lo que ocurrió ese fin de semana fue una acción deliberada para entorpecer el proceso”, afirmó Castellanos, asegurando que los hechos apuntan a una obstrucción planificada, no a un fallo organizativo.
Asimismo, criticó al expresidente Manuel Zelaya y al consejero del CNE, Marlon Ochoa, por tergiversar las declaraciones de López. Según Castellanos, ambos buscan desacreditar a la funcionaria para hacerla parecer incompetente, cuando en realidad enfrenta una campaña de debilitamiento interno.
“La advertencia de Cossette López es una señal de alarma ante el riesgo de una obstrucción deliberada del proceso electoral, especialmente con miras a las elecciones generales del 30 de noviembre”, advirtió.
Finalmente, Castellanos subrayó que no se trata de un problema de gestión individual, sino de una crisis institucional alimentada por intereses políticos. “Es evidente que hay un interés por remover a Cossette López del cargo, porque ha sido la piedra en el zapato del partido Libre y de quienes buscaron destruir el proceso electoral del 9 de marzo”, concluyó.
