Tegucigalpa.- La exprimera dama, en una emotiva declaración pública, ha expuesto las razones detrás de su insistencia en un nuevo juicio para su esposo, el ex presidente Juan Orlando Hernández, donde reveló cómo la analista de la DEA, Jennifer Taul, tergiversó información crucial durante el proceso judicial.
Según la exprimera dama, Taul engañó al jurado al afirmar que el tráfico de drogas aumentó durante el mandato de Hernández, cuando en realidad, los datos oficiales muestran una disminución significativa.
Más aún, la fiscal Elinor Tarlow no solo no corrigió este testimonio erróneo, sino que lo enfatizó durante sus argumentos finales, contribuyendo así a un juicio injusto.
La moción 33, presentada por el abogado Stabile, resalta la gravedad de esta conducta y subraya que, en casos similares, la jurisprudencia de Estados Unidos ha desechado los casos y tomado medidas correctivas contra los funcionarios deshonestos.
Pero eso no es todo. Otro tema igualmente preocupante es la presentación de un documento erróneo por parte de la Fiscalía del SDNY. Se trata de una estipulación, presentada como «prueba» GX 1010, que afirmaba que Juan Orlando Hernández fue trasladado directamente desde Honduras al aeropuerto del condado de Westchester.
Sin embargo, el abogado Stabile demostró que esta información era incorrecta, ya que Hernández fue inicialmente llevado a Ft. Lauderdale, Florida, donde fue interceptado por agentes de la DEA.
Este detalle es crucial, ya que define la jurisdicción donde se debía presentar a Hernández. Según Stabile, el juicio debería haberse llevado a cabo en el Distrito Sur de Florida, donde inicialmente fue llevado el ex presidente al ser extraditado de Honduras.
