Alan Bernárdez, líder comunitario de Triunfo de la Cruz y expresidente de la Plataforma Nacional de los Pueblos Negros de Honduras (Planaponh), responsabilizó al gobierno de Xiomara Castro y al asesor presidencial Manuel Zelaya Rosales por la crisis social, legal y racial que atraviesa la zona atlántica del país, producto de las invasiones de tierra y el respaldo político a grupos armados que actúan con impunidad.
En declaraciones para TN5 Matutino, Bernárdez aseguró que las invasiones de tierras se han convertido en una bandera del gobierno de Libre, que en lugar de buscar soluciones legales, ha incentivado la ocupación violenta de propiedades bajo un discurso ideológico destructivo. “Este gobierno le ha dado armas, drogas, alcohol y motivación ideológica a grupos irregulares que ya se comportan como guerrillas armadas. Les dicen que se metan, que usurpen, que esas tierras son suyas y que nadie los va a tocar porque tienen al gobierno de aliado”, denunció.
Según el dirigente garífuna, la situación ha puesto en total indefensión a pobladores nacionales, extranjeros y miembros de comunidades garífunas que han sido despojados de sus tierras. Denunció que operadores de justicia como la Policía Nacional, la Dirección de Investigación Policial (DPI) y el Ministerio Público han ignorado las denuncias presentadas por los afectados. “Le exigimos a Xiomara Castro y a Mel Zelaya que dejen de destruir este país, lo están incendiando y lo están haciendo a un ritmo acelerado”, sentenció.
Otra denuncia
Bernárdez también denunció que la Organización Fraternal Negra Hondureña (Ofraneh), respaldada por el gobierno de Libertad y Refundación, está envenenando a la juventud garífuna con ideología radical. Aseguró que los incitan a invadir terrenos con promesas falsas de propiedad, exponiéndolos al riesgo de morir enfrentando a dueños legítimos. “Están destruyendo familias, están sembrando odio y división entre criollos, negros y extranjeros. Esto puede terminar en una tragedia de muerte colectiva”, advirtió.
El líder comunitario afirmó que hay jóvenes drogados, armados y manipulados que ya patrullan la zona de Triunfo de la Cruz, muchos de ellos provenientes del departamento de Colón. “Andan por ahí en grupos de 25, invadiendo, amedrentando, generando un estado de zozobra. Y las autoridades no hacen nada. Callar es volverse cómplice”, dijo.
En declaraciones previas, Bernárdez también recordó que Ofraneh ha sido aliada del gobierno en estos casi tres años de administración, accediendo a espacios de poder e influencia. Calificó a esta organización de “contradictoria y oportunista”, ya que a su juicio ha manipulado sentencias internacionales para justificar el despojo de tierras sin respetar los derechos de terceros poseedores de buena fe. “No se puede quitarle la tierra a una persona sin antes indemnizarla, como mandan los fallos internacionales. Pero eso aquí se ignora”, afirmó.
Finalmente, Bernárdez advirtió que el país está al borde de un fraccionamiento social irreversible. “La sociedad hondureña no va a resistir esta división que están sembrando desde el poder. Este es un proyecto maléfico y perverso que destruirá a Honduras si no se detiene ya”, concluyó.
