Tegucigalpa.- El alcalde de Guanaja, Islas de la Bahía, Spurgeon Miller, anunció este martes el inicio de la segunda fase en la reconstrucción de la zona devastada por el incendio, donde se invertirá un promedio 8 millones de dólares.
«Ya estamos en la parte de limpieza y compactación de relleno de material selecto para comenzar con la reconstrucción de la infraestructura de las personas que lo perdieron todo, así como la parte primordial de los servicios públicos.
En ese contexto el jefe edilicio dijo que se ayudarán a las 650 personas damnificadas por el enorme incendio ocurrido del 2 de octubre en el pequeño archipiélago del caribe hondureño.
Para la etapa de reconstrucción las autoridades edilicias indicaron que necesitarán el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo, del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) y del gobierno hondureño.
Miller dijo que solo para la restauración de servicios públicos se requerirá una inversión de 50 millones de lempiras y en reconstrucción la cantidad será entre cinco a ocho millones de dólares.
De acuerdo con informes preliminares, más de 600 viviendas fueron consumidas por el incendio, que ocurrió por causas aún desconocidas, sin víctimas mortales.
La mayoría de las viviendas en Guanaja, que tiene más de 5,000 habitantes, son de madera.
Tres de los lesionados en el incendio fueron trasladados a Tegucigalpa, la capital, en un helicóptero de la Fuerza Aérea Hondureña, para que reciban atención médica.
Diferentes sectores del país se han unido al esfuerzo de las autoridades a los fines de recolectar ayuda humanitaria para asistir a los habitantes de Guanaja que con Roatán y Utila conforman el departamento insular de Islas de la Bahía, una las regiones turísticas más importantes de Honduras.
El objetivo es recolectas alimentos enlatados, agua potable, artículos de higiene personal, agua, ropa, frazadas y demás artículos de primera necesidad.
Según apuntes históricos, Guanaja fue descubierta el 30 de julio de 1502 por Cristóbal Colón, en su cuarto y último viaje a América, y la bautizó con el nombre de Isla de Pinos, por la abundancia de ese árbol.
A finales de octubre de 1998 la isla fue severamente afectada por el ojo del huracán Mitch que, en categoría 5, causó destrozos en todo el país
