‘Con Trump no van a estar jugando’, dice analista sobre el tratado de extradición

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Tegucigalpa.- El analista hondureño Oliver Erazo comentó este miércoles que la administración del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, podría generar cambios significativos en la política interna de los gobiernos de Centroamérica, específicamente de Honduras, Guatemala y El Salvador.

En el caso de Honduras, advirtió que es crucial observar cuál será la postura de Estados Unidos frente a la denuncia del Tratado de Extradición que hizo el gobierno de Xiomara Castro en agosto pasado por supuestas injerencias en asuntos internos.

«En Honduras debemos ver cuál será la actitud con respecto a la denuncia del Tratado de Extradición. Con Donald Trump no van a jugar a la política seudo de soberanía nacional, cuando este es un instrumento que el pueblo hondureño está pidiendo y exigiendo que vuelva a tener plena vigencia, y que se retire la denuncia», dijo Erazo en el noticiero TN5 Matutino de Canal 5.

Según el abogado, a diferencia de la administración de Joe Biden, Trump ha sido claro y directo respecto al tratamiento que dará a los regímenes autocráticos, socialistas y de corte izquierdista.

«Trump ha sido claro sobre el tratamiento frontal que dará desde el primer día de su gobierno a este tipo de gobiernos, incluso al que tenemos en Honduras», añadió.

Objetivos de Trump
Erazo también subrayó que el republicano hará los ajustes necesarios para alcanzar sus metas, buscando recuperar la grandeza de Estados Unidos como una potencia mundial.

«Trump viene con fuerza a establecer exigencias en la política del Triángulo Norte. Estamos hablando de medidas contra la corrupción, la autocracia y las violaciones de derechos humanos, que son ejes centrales en la política multilateral de la región», manifestó.

El analista agregó que «sin lugar a dudas, Trump intervendrá para recomponer internamente todos aquellos malos manejos en los gobiernos de Honduras, Guatemala y El Salvador».

A juicio de Erazo, «los gobiernos de izquierda, altamente corruptos e infiltrados por el narcotráfico, deben estar preocupados» por la llegada de Trump a la Casa Blanca.