Clubes de fútbol de Río podrán volver a los entrenamientos en junio

0
1069
Asimismo, la administración indicó que se realizarán encuentros posteriores con las agremiaciones futboleras para definir si se retomarán los torneos profesionales, aunque sin público. EFE

Río de Janeiro– Los equipos de fútbol de Río de Janeiro como Flamengo, Fluminense, Vasco de Gama o Botafogo podrán regresar a las canchas y retomar sus entrenamientos colectivos a partir de junio, según determinó la Alcaldía municipal este domingo.

Tras una reunión sostenida entre el alcalde de la ciudad, Marcelo Crivella, con los dirigentes de la Federación de Fútbol de Río de Janeiro y con los clubes del campeonato regional, la administración municipal señaló que, por el momento, los jugadores solo podrán desempeñar actividades de fisioterapia.

La decisión se dio luego de que la semana pasada Flamengo, campeón de la Copa Libertadores y la liga brasileña el año pasado, decidiera retomar sus entrenamientos ignorando las recomendaciones que ya había hecho la Alcaldía.

Desde el pasado miércoles el club más popular de Brasil volvió a las canchas del Ninho de Urubú, el centro de entrenamiento del Flamengo argumentando que los jugadores se «sentían seguros» por el protocolo que se había adoptado contra el COVID-19.

La plantilla del club carioca retomó las prácticas que habían sido suspendidas dos meses atrás a causa de la pandemia del coronavirus, que ya deja 22.666 muertos y más de 360.000 infectados en todo Brasil, el segundo país en el mundo más afectado por la enfermedad.

En un comunicado, la Alcaldía señaló que tras el encuentro de este domingo se adoptó un protocolo de seguridad y se determinó que, por el momento, los equipos solo podrán realizar actividades de fisioterapia y de rehabilitación muscular, siempre y cuando se sigan las recomendaciones sugeridas para evitar la propagación del virus.

Asimismo, la administración indicó que se realizarán encuentros posteriores con las agremiaciones futboleras para definir si se retomarán los torneos profesionales, aunque sin público. EFE