Tegucigalpa.– El expresidente de Honduras, Porfirio «Pepe» Lobo Sosa (2010-2014), afirmó que hubiera respaldado una ley que regulase la extradición de hondureños, pero subrayó que la reciente decisión del gobierno en relación al Tratado de Extradición con Estados Unidos es un acto de soberanía nacional.
Lobo recordó que durante su mandato, en 2012, se firmó el auto acordado que permitió la entrega de hondureños solicitados por la justicia estadounidense. «Nunca se operó con una ley, sino con un auto acordado», enfatizó el exmandatario.
Pepe Lobo también destacó que antes de este auto acordado, la situación en Honduras era compleja, con delincuentes que ningún juez se atrevía a sentenciar, lo que resultaba en su liberación. «Teníamos un problema y es que había delincuentes que ningún juez tenía valor de sentenciarlos y los soltaban», mencionó, haciendo referencia a casos como el de un «chachiro» que quedó en libertad debido al temor de los jueces.
El expresidente también recordó que durante el desarrollo del auto acordado, uno de sus asesores colombianos le advirtió sobre los riesgos de involucrarse en tratados de extradición, señalando que con el tiempo estos acuerdos podrían convertirse en un «circo».
Estas declaraciones de Lobo Sosa añaden un nuevo matiz al debate sobre la decisión del gobierno de finalizar el Tratado de Extradición, un tema que ha generado controversia tanto a nivel nacional como internacional.