Tegucigalpa.- El obispo de la diócesis de San Pedro Sula, Cortés, al norte de Honduras, Ángel Garachana, hizo este 27 de enero, al cumplirse un año de que la presidenta Xiomara Castro asumiera el poder, un llamado al diálogo y a crear un plan de Gobierno para hacer frente a los problemas crónicos que enfrenta el país centroamericano.
«Tenemos derecho, a partir de un primer año de tomar posesión, de conocer la realidad, tenemos derecho a que pronto haya un plan de Gobierno que consolide la democracia, el Estado de derecho con la separación de poderes y con la participación y transparencia ciudadana», dijo Garachana.
Monseñor dio estas declaraciones en el marco de una conferencia de prensa en la que dio detalles sobre su salida de la diócesis sampedrana, después de que el papa Francisco aceptara su renuncia y anunciara, el jueves 26 de enero, su relevo en el cargo religioso.
Garachana dijo que no había podido hacer una valoración profunda del primer año de la administración Castro, porque estaba concentrado en asuntos propios de la Iglesia, pero aseguró que «esperaba algo más» del Gobierno.
Diálogo
En ese sentido, el líder religioso consideró que es momento de que en Honduras haya diálogo y consensos entre las fuerzas vivas para ejecutar un plan de Gobierno a mediano plazo «para afrontar los graves problemas del país, que son crónicos».
Seguido mencionó que los problemas que merecen más atención son el desempleo, la pobreza, la educación, y la violencia.
Si no se afrontan estos problemas, dijo Ángel Garachana, «la migración será imparable y el deseo de miles de hondureños será buscar mejores formas de vida en otros países».