Tegucigalpa.- El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), ha emitido su reporte más reciente sobre el «Monitoreo de Protección en Movimientos Mixtos», ofreciendo datos clave sobre la situación migratoria en Honduras durante el mes de julio de 2023.
La agencia mantiene una vigilancia constante en las fronteras y áreas de tránsito para comprender las tendencias, necesidades y desafíos que enfrentan las personas refugiadas y migrantes en su paso por el país.
Según el ACNUR, el Instituto Nacional de Migración (INM), ha registrado un impactante aumento en la cantidad de personas que ingresan a Honduras en movimientos mixtos. Con un total de 48,953 individuos, julio ha marcado el mes con la cifra más alta de refugiados y migrantes en tránsito, representando un incremento del 83% en comparación con el mes previo.
Este crecimiento no solo se atribuye a la mejora en la capacidad de registro del INM, sino que refleja un constante aumento de personas involucradas en movimientos mixtos.
Origen de las personas en movimientos mixtos por Honduras
Los datos oficiales del INM indican que las nacionalidades más prominentes entre las personas en movimiento son Venezuela, Cuba y Ecuador, que han visto un incremento considerable en comparación con el mes anterior.
El reporte detalla que, entre enero y julio de 2023, un total de 184,446 individuos de más de 110 nacionalidades han ingresado de manera irregular a Honduras, mostrando un aumento del 180% en relación al mismo período del año anterior. La gran mayoría (92%) de estas personas se han registrado en delegaciones del INM ubicadas en Trojes y Danlí.
Venezuela se destaca como una de las principales fuentes de migración, representando el 51% de las personas en movimiento en julio, seguido por Cuba (14%), Ecuador (12%) y otras nacionalidades. Asimismo, las cifras revelan que el 40% de las personas en movimientos mixtos son mujeres y niños.
El ACNUR advierte que, según su monitoreo en campo, el número total de personas en movimiento por Honduras en 2023 supera las 300,000, cifra que difiere de las estadísticas oficiales del INM debido a que no todas las personas en movimientos mixtos se registran en el instituto, a pesar de la amnistía migratoria vigente.
Razones de abandono de su país
La agencia también realizó una encuesta a 172 refugiados y migrantes en movimiento durante julio. Las razones primordiales para abandonar sus países de origen incluyen el acceso limitado al empleo, la violencia generalizada, la falta de alimentos y la amenaza de intimidación.
Un porcentaje significativo de estas personas (al menos una de cada tres) indicaron la necesidad de protección internacional debido a la violencia o persecución en sus lugares de origen.
El informe revela que un 23% de los entrevistados no han vivido en su país de origen durante el último año, residiendo principalmente en Colombia, Perú, Chile y República Dominicana. Esto sugiere la existencia de movimientos secundarios considerables. Las dificultades en términos de acceso a derechos y la integración local, junto con la violencia, se citan como razones para abandonar el último país de residencia.
Las necesidades más urgentes señaladas por las personas desplazadas son alimentos, asistencia médica, ropa, agua e información sobre servicios de protección y vías legales. Las plataformas de comunicación más utilizadas por los desplazados para obtener información incluyen WhatsApp y redes sociales como Facebook e Instagram.
La situación alimentaria es crítica para muchos, con el 41% de los encuestados reportando haber tenido solo dos comidas el día previo a la encuesta.
En cuanto al Programa de Libertad Condicional de EE.UU., la encuesta indica que una mayoría de los entrevistados tiene algún conocimiento al respecto. Sin embargo, solo el 23% posee un pasaporte válido, uno de los requisitos. Algunos entrevistados afirmaron que, a pesar de conocer el programa, continuarán su viaje hacia la frontera estadounidense debido a la imposibilidad de cumplir con los criterios de elegibilidad.
La situación migratoria en Honduras continúa evolucionando, generando desafíos complejos tanto para las personas en movimiento como para las autoridades locales y las organizaciones internacionales encargadas de la protección y asistencia de los refugiados y migrantes.
Monitoreo de Movimientos Mixtos Honduras, según ACNUR.
