Ministro de Seguridad confirma la participación de exmiembros de la policía y exmilitares en desapariciones masivas en Honduras

0
80

Tegucigalpa – En una impactante revelación, el ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez, confirmó este miércoles la implicación de exmiembros de la policía y exmilitares en las recientes desapariciones masivas ocurridas en el norte del país.

Sánchez destacó que la policía está enfrentando una fuerte resistencia por parte de las estructuras criminales debido a su efectividad. “Ahorita la Policía es un problema para las estructuras criminales porque estamos siendo contundentes. Nadie habla de la reducción de la tasa de homicidios en ocho puntos en dos años”, afirmó el ministro.

En referencia a los secuestros masivos en Tela (Atlántida) y Baracoa (Cortés), Sánchez explicó que muchos detalles no pueden ser divulgados debido a las investigaciones en curso. No obstante, abordó las declaraciones del abogado Carlos Chajtur, quien mencionó la participación de expolicías y exmilitares en estos actos. Sánchez sostuvo que Chajtur presenta verdades a medias y que corresponde a la Secretaría de Seguridad ofrecer una perspectiva equilibrada.

El ministro detalló que uno de los secuestrados, un ingeniero, es hermano de alias ‘Chafalo’, solicitado en extradición y actualmente en la Penitenciaría Nacional. “El abogado Chajtur es el abogado de él, es una acción lícita profesional de él porque es abogado, pero coincidentemente también fue abogado de (Julissa) Bandy, de Magdaleno Meza, fue abogado de otro narcotraficante pedido en extradición que no recuerdo”, explicó.

Sánchez subrayó que, aunque hay expolicías y exmilitares involucrados en bandas de secuestradores, esto no implica que la policía en su conjunto sea el problema. “Hay expolicías secuestrados y se supone que hay expolicías en las bandas que secuestran, también hay exmilitares, pero eso no significa que el problema sea la Policía”, puntualizó.

El ministro defendió que las estructuras criminales uniformadas con equipos tácticos sofisticados están enfrentándose a los cuerpos de seguridad del Estado. “Una estructura secuestró a la otra. Lo que hay que dejar claro es que las bandas criminales como se han atomizado por el descabezamiento y la histórica extradición de personas están replanteando un mercado criminal”, detalló.

Sánchez también relacionó estos eventos con el suceso en Villas Mckay de San Pedro Sula, donde un expolicía fue detenido en una operación del orden. “Estos jóvenes, donde estalló una granada, estaban reuniéndose para ir a rescatar y enfrentarse a la otra estructura criminal, donde se incautaron hasta lanzagranadas es parte de la estructura criminal que está secuestrada”, explicó.

Recordó que tras la depuración de la policía en 2016, la droga seguía pasando por Honduras debido a la complicidad del expresidente Juan Orlando Hernández, condenado recientemente a 45 años de cárcel en Estados Unidos.

Entre las reformas solicitadas al Poder Legislativo, el ministro mencionó la necesidad de agravar las penas por el uso de uniformes policiales o militares falsos en la comisión de delitos, incrementando la sanción en una tercera parte.

“Los uniformes policiales están registrados e inventariados, con chip, que difícilmente un elemento de la institución los va a prestar sabiendo que se arriesga a ser imputado por un delito penal”, aseguró.

Sánchez concluyó señalando que el crimen organizado está siendo golpeado por la estructura del Estado, lo que ha llevado a estos grupos a deslegitimar a las autoridades de seguridad y defensa.

Añadió que en Centroamérica abundan los cargamentos de armas, lo que complica aún más la lucha contra el crimen. “Además, tenemos a uno de los ejecutivos de la Tasa de Seguridad extraditado y preso en Estados Unidos”, evidenció.

Esta revelación subraya la complejidad de la lucha contra el crimen en Honduras y la determinación de las autoridades para enfrentar este desafío.