Tegucigalpa – El presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, lanzó duras críticas contra la directora ejecutiva del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), Gabriela Castellanos, cuestionando su autoridad moral para emitir juicios en su contra.
Redondo sugirió que Castellanos carece de la legitimidad necesaria para criticar su gestión, aludiendo a supuestos favores recibidos del exfiscal general en relación con acusaciones sobre contratos otorgados a familiares de Castellanos.
“Para mí no tiene autoridad moral. Creo que cuando una persona recibe favores del exfiscal general con una acusación que le hicieron por haber dado varios contratos a familiares, eso habla muchísimo”, expresó Redondo en respuesta a las recientes declaraciones de Castellanos.
El presidente del Legislativo también criticó la gestión de Castellanos al frente del CNA, describiéndola como una dictadura y sugiriendo la necesidad de un relevo generacional en la lucha contra la corrupción. “Tiene que venir una nueva generación de personas que realmente combatan a la corrupción”, añadió.
El conflicto entre Redondo y Castellanos se intensificó luego de que el líder del Congreso utilizara una sesión plenaria para cuestionar tanto al CNA como a la Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ), argumentando que ninguna de estas organizaciones tiene la autoridad para fiscalizar a los congresistas ni para combatir la corrupción de manera efectiva.
En su nueva intervención, Redondo sugirió que la falta de resultados del CNA es una de las razones por las que la Comisión Internacional Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH) aún no ha sido instalada en el país. “La gente pide la instalación de la CICIH porque el CNA fracasó, no sirve”, afirmó.
Este cruce de declaraciones subraya las tensiones entre las instituciones hondureñas y las organizaciones de la sociedad civil en torno a la lucha contra la corrupción, un tema que sigue siendo de alta relevancia en el debate público del país.