La revolución de la banana de Art Basel

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Vista de un grafiti con la imagen de "Comedian", la obra con banana del italiano Maurizio Cattelan, firmado por Alek en uno de los pilares de la concurrida autopista US1 que atraviesa el centro de Miami, Florida. EFE/Ana Mengotti

Miami (EE.UU.) – El revuelo causado por «Comedian», una obra del italiano Maurizio Cattelan consistente en una banana pegada a la pared que tenía un precio de 120.000 dólares en la reciente feria Art Basel de Miami Beach, lejos de acabarse con su ingestión por un artista «hambriento» de fama, no ha hecho más que empezar.

Vídeos de artistas comiéndose una banana, réplicas hechas con rosquillas o barras de pan, grafitis en la principal vía de Miami y hasta prendas de ropa con la fruta y la cinta adhesiva ya han comenzado a aparecer y seguramente no serán las últimas iniciativas en torno a «Comedian».

Las redes se han llenado de diferentes «Comedian», como el de un usuario de Twitter que pegó un ratón de ordenador a la pared, otro que le pegó la oreja a un retrato de Van Gogh con la misma cinta adhesiva que usó Cattelan o una empresa que en un vídeo publicitario en vez de banana usó un bizcocho de crema y señaló que «el arte nunca había sabido mejor».

Por muy distintas razones, «Comedian» está alcanzando la categoría de icono artístico mundial que logró en 2012 el «Ecce Homo» restaurado en la localidad española de Borja por una octogenaria más bienintencionada que dotada para el arte.

Un restauración fue tan sonada que hasta un estadounidense hizo una ópera sobre el «Ecce Homo» de Borja.

EL REVUELO

«Comedian» no solo ocupó grandes espacios en la prensa cuando se anunció el viernes pasado que se había vendido y que era la obra más fotografiada de la prestigiosa Art Basel, donde estaban representados 4.000 artistas de todo el mundo.

El sábado llegó el performance de David Datuna que acabó con la banana, aunque no con la obra según la galería Perrotin, que la presentaba en Art Basel, y el domingo la detención de Roderick Webber, un hombre que escribió con un pintalabios rojo «Epstein no se suicidó» en la pared de Art Basel que había quedado vacía.

Ahora se sabe que Datuna puede no haber sido el primero al que se le ocurrió la idea de comerse la banana de Cattelan.

El artista urbano cubano radicado en Miami Danilo Maldonado «El Sexto» se grabó simulando que robaba la banana de Art Basel y luego se la comía y colgó el vídeo en Instagram el sábado a mediodía, «una hora antes» de la entrada en escena del georgiano Datuna.

«Nadie vio la cantidad de kilómetros que tuve que correr para poder salvar el platanito este. Voy a comerme la obra esta ahora», dice despegándose la banana de la camisa.

Después del revuelo causado, este grafitero cubano se pregunta «hasta dónde ha llegado el mundo del arte», pero cree que «Comedian» ha logrado su objetivo que no era otro que «el desconcierto total».

«Cuando la vi por primera vez me pareció muy irónica y perfectamente una burla, porque desde hace tiempo el arte no se pone nuevos límites», dijo en una entrevista con Efe.

«Toda obra de arte quiere que se hable de ella, o que se cree una espectativa o una discusión alrededor de ella, pero esta obra lo sobrepasó», añadió.

NUEVAS BANANAS

Ahora, la revolución de la banana continúa y algunos artistas ya han comenzado a pintar esta fruta con una cinta adhesiva por algunos rincones de la ciudad miamense.

Uno de estos grafitis se puede encontrar en uno de los pilares de la autopista US1 que atraviesa el centro de Miami firmado por Alek.

El artista Christopher Morphis, por su parte, pintó una réplica en directo de la famosa fruta durante Art Basel y ahora quiere subastar su obra a través de sus redes sociales.

Por el momento, la obra ha alcanzado un valor de 400 dólares, pero se puede seguir pujando por ella.

El Sexto aseguró que también conoce a gente que «ya está creando camisetas y sudaderas» con el símbolo de la banana impreso en ellas.

¿ARTE O BURLA?

Lo que no hay duda es que la escultura de Cattelan ha puesto a muchos pensar y a discutir sobre si es arte o no y algunos les ha agudizar el ingenio.

El Departamento de Policía de Tampa (oeste de Florida) publicó el lunes una fotografía en Twitter de «Sgt. Donut», una rosquilla pegada a la pared con un precio de venta de 200.000 dólares.

El jefe de la Policía de esa ciudad, Brian Dugan, fue el artífice de «la mejor obra de arte» de Tampa y se inició una subasta entre los miembros del cuerpo para ver quién ofrecería más por la rosquilla.

Otros también se lo tomaron con humor, como una panadería cubana de Miami que el pasado sábado subió varias fotografías y vídeos de una barra de pan pegada con cinta adhesiva puesta a la venta por el módico precio de un millón de dólares.

El Sexto dice que el fenómeno de «Comedian» realmente logró «crear algo nuevo» y a la vez «consiguió opacar la visibilidad de muchas obras» de Art Basel.

«Es una burla total para que la gente se preste a reflexionar qué ha venido pasando para que esto ocurriera. ¿Qué es lo que realmente hay ahí nuevo que no se haya hecho ya?», aseveró.