Tegucigalpa.- La Presidenta Xiomara Castro, se reunió con el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas y la embajadora Laura Dogu, en la frontera sur de los Estados Unidos para constatar la emergencia migratoria que sufren los hondureños detenidos, especialmente las niñas y niños no acompañados e instruyó a su comitiva de alto nivel, que se atienda de inmediato la problemática.
Durante la sensible e histórica visita a McAllen, Texas, la mandataria recorrió un centro de procesamiento de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza en Donna, donde constató personalmente, en la expresión de sus ojos y sus miradas, así como en sus palabras, la angustia y tristeza de nuestros migrantes menores no acompañados y migrantes retenidos que escapan por ser víctimas de la pobreza y violencia que se impuso por la narcodictadura y en el post-golpe de Estado de 2009, los cuales deterioraron fuertemente sus condiciones de vida hasta obligarlos a buscar como sobrevivir aún distanciados de sus propias familias.
Consciente de esta crisis humanitaria, la Presidenta en su intervención cuestionó el injusto modelo económico de acumulación, codicia y corrupción de Honduras que impuso la dictadura y el narcoestado; y anunció a la comunidad nacional e internacional, que partiendo de los principios humanitarios que deben caracterizar la migración, la apertura inmediata, antes de que finalice este año 2023, de cuatro consulados y seis oficinas móviles, así como el nombramiento de un equipo de expertos en materia legal para su protección y asesoría gratuita a los emigrantes.
Castro invitó a Mayorkas a «hacer esfuerzos conjuntos a manera de comprender lo que hoy viven nuestros países de América Latina, que lucha por cambiar el sistema económico y social injusto que los afecta y las alternativas para trasformarlo y que sea equitativo y que permita a los gobiernos tener la posibilidad de luchar contra la pobreza».
La jefa del Estado hondureño aprovechó la trascendente reunión para solicitar que se extienda la redesignación del Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) a las y los hondureños afectados por las tormentas Eta y Iota.
Para finalizar, la mandataria en su reunión bilateral con el secretario Mayorkas, agradeció su cooperación y el hecho de facilitar su presencia en la frontera y en los centros de tránsito y detención de emigrantes dentro de EE. UU. y resaltó que:
«Tenemos que construir y cooperar conjuntamente con medidas justas y legales para nuestros migrantes», a la vez, envió un potente mensaje recordando que: «Al recibir la Presidencia de la República asumí un compromiso histórico de luchar por cambiar el narcoestado y las condiciones en nuestro país, por retornar al Estado de Derecho, frente a la dictadura y por devolverle al Pueblo la esperanza de que en nuestro país se pueden generar condiciones que marquen la diferencia».
«Negar la migración no es la solución», finalizó.