El vicepresidente del Congreso Nacional de Honduras, Hugo Noé Pino, advirtió este jueves que la imposición de un impuesto a las remesas por parte del gobierno de Estados Unidos no solo tendría efectos devastadores en los hogares hondureños, sino que también afectaría directamente las reservas internacionales del país.
“Impactaría no sólo en las familias que dejarían de recibir estos recursos, también las reservas internacionales del país se verían afectadas, dado que siempre vamos a necesitar dólares para cubrir nuestras importaciones”, explicó el diputado oficialista.
Noé Pino detalló que, según estimaciones preliminares, si se concreta un impuesto del 5 % sobre las remesas, Honduras podría dejar de recibir cerca de 500 millones de dólares anuales, una cifra que representa un golpe significativo para la economía nacional, altamente dependiente de estas transferencias.
La declaración del parlamentario se produce horas después de que la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobara un proyecto de reforma fiscal impulsado por el presidente Donald Trump, que contempla la aplicación de impuestos a las remesas enviadas al extranjero, incluyendo aquellas dirigidas a países como Honduras.
El proyecto ahora pasa al Senado estadounidense, donde será sometido a debate. Aunque reconoció que los republicanos tienen mayoría, Noé Pino expresó su esperanza de que la iniciativa no se concrete.
“Es necesario hacer gestiones con los senadores estadounidenses para transmitirles el impacto que este impuesto tendría sobre millones de familias hondureñas”, señaló, al tiempo que hizo un llamado a las organizaciones de hondureños en EE.UU. y a aliados internacionales a sumarse en defensa de los sectores más vulnerables.
Finalmente, advirtió que, de sumarse este impuesto a otros gravámenes como el arancel del 10 %, Estados Unidos estaría enviando un mensaje contradictorio al intentar frenar la migración mientras restringe los recursos que sustentan a miles de hogares en Centroamérica.