Identifican a víctimas de sangriento ataque en colonia La Joya de la capital

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Tegucigalpa.- Las víctimas del sangriento tiroteo ocurrido en colonia La Joya de la capital ya han sido identificadas por las autoridades hondureñas.

En la masacre perdieron la vida Carlos Eduardo Espinal Castillo, de 23 años de edad, Marcos Antonio Reyes López (27), Gabriel Joseph Arce Morales y Diego Alejandro Velásquez Reyes de (17).

En la escena se contabilizaron más de 50 casquillos de bala, según reportes de prensa, quienes aseguraron que en el lugar de la matanza hay cámaras de seguridad privada.

La muerte múltiple de los cuatro ciudadanos es desconocida de momento, sin embargo se indicó que se está tras la pista de los gatilleros que sin mediar palabra atacaron.

En la masacre perpetrada la noche del sábado por pistoleros dos personas más resultaron con heridas de gravedad, por lo que reciben asistencia en un centro hospitalario de la ciudad.

Las informaciones indican que varios de los infortunados se encontraban departiendo en las afueras de una pulpería en la referida colonia cuando fueron encañonados por sujetos que llegaron a bordo de un vehículo turismo con armas de grueso calibre.

El fuerte tiroteo duró aproximadamente un minuto y bastó para acabar con la vida de dos personas en el instante. Moradores que realizaban compras en el lugar también se vieron víctimas de los proyectiles.

Inicialmente, se reportó que dos personas fallecieron al instante, mientras que cuatro personas fueron trasladadas hacia un centro asistencial. Sin embargo, dos de los heridos perecieron por la gravedad de sus heridas.

Uno de los ahora fallecidos quedó inerte al pie del portón de la pulpería cuando intentaba escapar del ataque, pero fue rematado por los sujetos. Un segundo occiso quedó en el asiento  trasero de un automóvil.

Los vecinos y familiares de los infortunados vivieron momentos de llanto y dolor, aterrorizados comentaron que es primera ocasión que sucede un hecho tan cruel en la zona. 

Anoche se maneja que uno de los difuntos respondía en vida al nombre de “John”, de 31 años y que laboraba como guardia de seguridad en el área.

Hasta a eso de las 10:00 de la mañana de este domingo no había sido entregado los restos mortales del Diego Alejandro, quien será velado en la iglesia de una populosa colonia, cercana al trágico hecho.