El jefe del Estado Mayor Conjunto, general Rossevelt Hernández, defendió este domingo su solicitud al Consejo Nacional Electoral (CNE) para que las Fuerzas Armadas reciban copias de las actas de resultados a nivel presidencial emitidas por las Juntas Receptoras de Votos (JRV).
El alto mando militar aseguró que su petición no constituye una injerencia, sino que responde a las atribuciones que le otorga la Constitución.
“Hemos hecho esa solicitud de manera respetuosa, no es una injerencia, sino facultades que le da la Constitución. Fue un diálogo en el que dimos a conocer nuestro punto de vista, por lo que no es intromisión, es ser garantes del proceso”, expresó Hernández en declaraciones a la prensa.
El general explicó que la solicitud será presentada de forma formal y que se trata de una recomendación para fortalecer la transparencia electoral. “Los consejeros serán los encargados de aprobar o desestimar la propuesta, nosotros respetaremos su decisión”, agregó.
Hernández pidió interpretar correctamente el artículo 272 de la Constitución, afirmando que las Fuerzas Armadas están dispuestas a apoyar el proceso electoral sin intervenir en las funciones del CNE. “No intentamos ser injerentes, estamos en la disposición de apoyar nada más”, puntualizó.
Por su parte, la presidenta del CNE, Ana Paola Hall, reaccionó a través de sus redes sociales calificando la solicitud como una injerencia en las atribuciones exclusivas del ente electoral. Hall recordó que, según la ley, el escrutinio y la transmisión de resultados son competencias exclusivas del CNE y que el artículo 272 de la Constitución define claramente las funciones de las Fuerzas Armadas en los procesos electorales, limitándolas al resguardo y la seguridad del material electoral.
La propuesta del jefe militar ha generado debate entre sectores políticos y jurídicos, que advierten sobre la importancia de mantener la independencia del CNE en el manejo de los resultados electorales a un mes de los comicios generales del 30 de noviembre.





















