Tegucigalpa.- El Ministerio Público (MP) citará al párroco de la iglesia San Isidro Labrador de Tocoa, Colón, Carlos Orellana, para que brinde información luego de que responsabilizara públicamente al alcalde Adán Fúnez por la muerte del regidor, líder ambientalista y religioso Juan Flores, según anunció este lunes el vocero de la Fiscalía, Yuri Mora.
«El sacerdote de esta iglesia es una persona de interés para el Ministerio Público, y en su momento los fiscales tendrán que llamarlo para ver qué puede detallar con respecto a este asesinato», afirmó Mora.
El sacerdote jesuita Carlos Orellana denunció durante su homilía dominical del 15 de septiembre que la muerte de Juan Flores «era una muerte anunciada».
«Sabemos bien que lo asesinaron sicarios pagados, y en este caso, la iglesia responsabiliza a don Adán Fúnez y a sus secuaces, quienes cobardemente le han quitado la vida», agregó.
Orellana señaló que Juan Flores -quien se oponía a un proyecto minero en Colón- «era una piedra en el zapato de la gran mayoría de la corporación municipal de Tocoa y de don Adán Fúnez».
Asesinato de Flores
Juan Flores fue asesinado la noche del 14 de septiembre pese a que contaba con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) tras denunciar campañas de difamación, amenazas, hostigamientos, intimidaciones y violencia por defender los derechos ambientales en Honduras.
El gobierno hondureño, la Iglesia Católica, así como diversas organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales, han condenado su muerte y exigido una investigación exhaustiva para que el crimen no quede impune.
Las autoridades policiales aseguran que están investigando el caso y han anunciado una recompensa de 500 mil lempiras por información confiable que conduzca al paradero del responsable de su muerte.
Días antes de su muerte, Flores pidió al alcalde Adán Fúnez que renunciara a su cargo después que se le observara reunido con narcotraficantes en 2013. El la misma reunión participó el diputado de Libre, Carlos Zelaya.
