Tegucigalpa.- El empresario estadounidense Murray Paul Farmer volvió a agitar el panorama político y judicial de Honduras este viernes con una contundente denuncia publicada en su cuenta de X.
Sin rodeos, acusó de corrupción a los jueces Ingrid Monzón López, José Moisés Vallecillo y Edwin Anemis López, señalándolos por, según él, reactivar un caso ya resuelto con el fin de proteger a la funcionaria Rixi Moncada y obstruir el pago de una deuda y el acceso a la justicia.
Además, Farmer fue enfático al anunciar que ha solicitado la cancelación de las visas estadounidenses de los mencionados jueces.

Farmer lanzó una frase que ha generado revuelo: “No más Disney para corruptos”, en clara alusión a funcionarios que, pese a sus presuntas acciones ilícitas, siguen disfrutando de privilegios como viajar a Estados Unidos.
Este nuevo pronunciamiento se produce después de que el pasado fin de semana el empresario divulgara un video detallando una demanda interpuesta ante el FBI contra el Estado de Honduras; Rixi Moncada, y otros funcionarios asegurando que las autoridades estadounidenses confirmaron delitos cometidos por Moncada bajo la ley penal de Estados Unidos.

El empresario recordó también que ganó una demanda previa contra el Estado hondureño relacionada con un proyecto de infraestructura antes del huracán Mitch, en el que su empresa construyó sistemas de agua potable, trabajo que fue entregado sin recibir pago alguno.
Farmer denunció que, durante el gobierno actual, solo se pagó al subcontratista hondureño, mientras que su empresa estadounidense fue ignorada, calificando esta situación como un acto de racismo y una política antiamericana.
Con esta nueva exigencia, Farmer vuelve a poner bajo la lupa a funcionarios hondureños, mientras la posible cancelación de visas se convierte en una amenaza constante para quienes son señalados por actos de corrupción.