
Tegucigalpa.- Tras que la justicia colombiana lo encontrara culpable por los delitos de soborno a testigos en la actuación penal y fraude procesal, hoy ha sido sentenciado a 12 años de prisión el expresidente colombiano Álvaro Uribe.
La culminación del juicio es histórico tras que, cuando era Senador, instigó, toleró y promovió una serie de actuaciones ilegales que se desplegaron de forma simultánea en cárceles del país con tres objetivos, para quitarle valor a los testigos Juan Guillermo Monsalve y Pablo Hernán Sierra que lo han involucrado con grupos paramilitares, presionarlos para que se retractaran, engañar a la justicia y lograr que paramilitares afirmaran falsamente que Iván Cepeda les había hecho ofrecimientos.
Cabe recordar que, el exmandatario había denunciado allí al congresista de izquierdas Iván Cepeda, que lo señalaba de tener vínculos con grupos paramilitares, de sobornar a testigos para que se fueran contra el presidente de derechas.
Sin embargo, en 2018, la Corte Suprema de Justicia cerró el caso contra Cepeda y lo abrió contra Uribe Vélez, alegando que fue él quien buscó sobornar testigos.
La decisión será apelada por la defensa de Uribe, quien enfatiza en que él sí sabía de la existencia de un entramado ilegal.
Si el Tribunal Superior de Bogotá mantiene en pie el fallo de la jueza Sandra Heredia, la defensa tiene incluso la posibilidad de seguir escalando su apelación hasta la Corte Suprema de Justicia.