Con EE. UU. se mantiene un lenguaje «franco y directo», dice canciller hondureño luego de reunirse con embajadora Laura F Dogu

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Tegucigalpa.- El canciller de Honduras, Enrique Reina dijo este miércoles que su país mantiene «un lenguaje muy franco y directo» con Estados Unidos, luego del roce que tuvo el martes con la embajadora de ese país, Laura F. Dogu, por una opinión sobre una reforma eléctrica propuesta por el Ejecutivo hondureño.

«Debemos alejar cualquier temor de que la relación se complique; al contrario, creo que mantenemos un lenguaje muy franco y directo con los Estados Unidos, con mucha dignidad en nuestra relación», enfatizó Reina desde Panamá, en declaraciones a la radio HRN en Tegucigalpa.

El martes, Dogu dijo en la red social Twitter que «Estamos analizando la propuesta energética y como escrito nos preocupa el efecto que tendrá sobre la inversión extranjera y la independencia de la agencia reguladora», en alusión a la reforma al sector eléctrico que el Ejecutivo hondureño envió el lunes al Parlamento.

La respuesta del canciller Reina no se hizo esperar y pocos minutos después le dijo en Twitter a Dogu: «Señora embajadora usted ha sido recibida con los brazos abiertos. La reforma energética es urgente como Estado, combate una situación heredada de corrupción y pobreza. Nos preocupa su desacertada opinión sobre política interna, la que no contribuye a las buenas relaciones con EEUU.».

Hoy, Reina enfatizó que el martes se comunicó con Dogu y que «cordialmente hablamos de que estos mecanismos de conversación se deben mantener a los niveles adecuados».

En su opinión, cualquier declaración pública puede ser delicada y entorpecer las negociaciones que se llevan a cabo en Honduras sobre el tema de la energía eléctrica con empresas que prestan el servicio.

El canciller hondureño señaló además que el tema energético es una «prioridad nacional» y de «soberanía nacional», y que el Gobierno que preside Xiomara Castro «busca poner orden», por el descalabro de la estatal Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), afectando las finanzas del país, lo que no desconoce Estados Unidos.

El roce entre el nuevo Gobierno de Honduras que desde el 27 de enero preside Xiomara Castro, y la nueva embajadora de EE.UU. en Tegucigalpa, que asumió el 12 de abril, es el primero entre los dos países, que desde antes de las elecciones generales del 28 de noviembre de 2021 se comenzaron a estrechar con la ahora gobernante del país centroamericano.

El anteproyecto Ley Especial de Energía Eléctrica, del poder Ejecutivo, fue presentado el martes en el Parlamento hondureño, que indicó que el objetivo de la norma es «garantizar el servicio de electricidad como un bien público de seguridad nacional y un derecho humano de naturaleza económica y social».

El lunes, el Gobierno hondureño inició reuniones con los generadores privados de energía, con el fin de «renegociar» los contratos que tienen con la ENEE, y advirtió que, si no reducen la tarifa, el Estado podría asumir el control de sus plantas tras el pago de «un justiprecio» de las mismas, según el anteproyecto de ley.

Honduras tiene una demanda de unos 1.700 megavatios, de los que más del 60 % son generados por plantas térmicas que funcionan con derivados del petróleo, lo que representa para el país una factura muy alta. EFE