Chile decreta dos días de duelo por el avión siniestrado que iba a la Antártida

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Familiares de los tripulantes del avión Hércules C130 de la Fuerza Aérea de Chile (FACH) que se accidentó en la tarde del lunes en el mar de Drake, durante el trayecto desde la austral ciudad de Punta Arenas a la Antártida. EFE/Alberto Valdés/Archivo

Santiago de Chile – El Gobierno chileno decretó este viernes dos días de duelo nacional por las 38 personas que iban a bordo del avión militar que el lunes cayó al mar cuando se dirigía a la Antártida, mientras que los equipos forenses iniciaron las tareas de reconocimiento de los cuerpos hallados hasta el momento.

«El duelo nacional regirá a partir del sábado y hasta el domingo 15, en los que se izarán a media asta la bandera nacional en las sedes del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial (…) y además se suspenderán los actos de Gobierno que revistan carácter de festejo», informó el Gobierno en un comunicado.

El Hércules C-130 despegó el lunes a las 16.55 hora local (19.55 GMT) de la base militar de Chabunco, en la meridional ciudad de Punta Arenas, y perdió el contacto cuando le quedaban cerca de una hora y 500 kilómetros para aterrizar en la base Presidente Eduardo Frei Montalva, una de las más importantes del continente helado.

El avión, que tenía combustible para mantenerse en el aire hasta las 00.40 hora local (03.40 GMT), trasladaba personal que iba a hacer tareas de mantenimiento en la base, entre ellas un tratamiento anticorrosivo de sus instalaciones, además de revisar el oleoducto flotante que abastece de combustible a la zona.

Los primeros restos de la aeronave se encontraron el miércoles en las aguas del mar de Drake, que separa Suramérica del continente helado y cuyas aguas están consideradas unas de las más turbulentas del planeta.

La Fuerza Aérea de Chile (FACh) informó el jueves que era «prácticamente imposible» encontrar supervivientes dadas las «condiciones» en las que estaban los restos humanos hallados hasta el momento, que este viernes fueron trasladados a Punta Arenas para someterles a pruebas de ADN y proceder a su identificación.

A bordo de la aeronave viajaban 38 personas: 32 militares de las FACh, tres miembros del Ejército y tres civiles, de los cuales dos eran trabajadores de la empresa de ingeniería Inproser y otro era estudiante de la Universidad de Magallanes.

El accidente es la peor tragedia aérea en el país desde 2011, cuando cayó al mar un avión con 21 personas que se dirigía al archipiélago Juan Fernández, unos 670 kilómetros de distancia de la costa chilena, cargado de ayuda humanitaria para su reconstrucción tras el terremoto de magnitud 8,8 de 2010.