Tegucigalpa – La presidenta Xiomara Castro expresó este lunes su respaldo a los más de 70 mil hondureños que quedarán sin protección migratoria tras la cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS) por parte del gobierno de Estados Unidos. A través de un comunicado, la mandataria calificó la medida como parte de una estrategia electoral estadounidense y reafirmó el compromiso de su gobierno con los migrantes afectados.
“A ellos les digo con firmeza: no están solos”, afirmó Castro, quien informó que ha instruido a la Cancillería a utilizar todos los recursos legales disponibles, así como a fortalecer el apoyo consular y jurídico para proteger los derechos de los hondureños en EE. UU.
La presidenta aseguró que su gobierno mantendrá un diálogo abierto y franco con las autoridades estadounidenses, con el objetivo de evitar una expulsión masiva y encontrar una salida humana a la situación. También apeló a la importancia de preservar la relación bilateral y el respeto a los tratados internacionales.
El fin del TPS representa un duro golpe para miles de familias hondureñas, muchas de las cuales dependen de los ingresos enviados desde el extranjero, y pone en riesgo la estabilidad económica y social de quienes podrían ser deportados en los próximos meses.