Tegucigalpa.- En respuesta a recientes declaraciones de la presidenta hondureña Xiomara Castro, el representante estadounidense Andy Ogles (R-TN) presentó una legislación que permitiría al presidente Donald Trump suspender toda asistencia a Honduras. Esto, tras la amenaza de cerrar la Base Aérea Soto Cano si Trump implementa deportaciones masivas de inmigrantes hondureños.
La Base Soto Cano, ubicada en Comayagua, alberga a más de 500 militares estadounidenses y un número similar de civiles que desempeñan labores de ayuda humanitaria y combate al crimen organizado. Desde su establecimiento en la década de 1980, la instalación ha jugado un papel crucial en la cooperación bilateral.
En su discurso de Año Nuevo, Castro señaló que, de darse deportaciones masivas, Honduras reconsideraría la presencia militar estadounidense, argumentando que «sin pagar un centavo durante décadas, mantienen bases que, bajo estas condiciones, perderían toda razón de existir en Honduras».
Ogles, junto con la copatrocinadora María Salazar (R-FL), redactó el proyecto de ley denominado «HONDURAS» (Honduras Obstinadamente Descuida la Defensa y Corre el Riesgo de Alienar la Seguridad). Este autoriza al presidente estadounidense a detener toda ayuda, incluyendo asistencia militar, si el gobierno hondureño se niega a mantener la cooperación en seguridad.
Según datos del Departamento de Estado, Estados Unidos ha enviado más de $2,700 millones en ayuda a Honduras desde 2001. Sin embargo, Ogles enfatizó: «Hemos asistido de manera constante a Honduras durante décadas. No permitiremos que ningún gobierno extranjero dicte términos que comprometan nuestra seguridad nacional».
El tema migratorio es crucial para ambas naciones, ya que más de un millón de hondureños residen en Estados Unidos, con 280,000 bajo riesgo de deportación. Las remesas provenientes de Estados Unidos representan el 90% de los $8,850 millones enviados a Honduras en 2024, lo que equivale al 25% de su PIB.
En este contexto, Castro, como presidenta pro tempore de la CELAC, anunció una reunión en México para abordar el impacto migratorio antes de la toma de posesión de Trump, programada para este lunes.
Con este proyecto de ley y las tensiones entre ambas naciones, se vislumbran posibles consecuencias en las relaciones bilaterales y la estabilidad regional.