La exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, afirmó que el Partido Libertad y Refundación (Libre) atraviesa un marcado deterioro político y que, según las encuestas recientes, su nivel de respaldo ciudadano no supera el 15 por ciento frente a las demás fuerzas políticas.
Castellanos sostuvo que la falta de credibilidad en el oficialismo se refleja en la baja movilización de sus bases. Como ejemplo, mencionó la última convocatoria de Libre en San Pedro Sula, donde la escasa participación llevó incluso a que el coordinador del partido, Manuel Zelaya, no se presentara en el estrado principal.
“Ese hecho refleja la crisis interna y el desgaste político que enfrenta el oficialismo”, subrayó.
Centralismo y crisis de representación
En su análisis, la exrectora consideró que los partidos políticos hondureños siguen anclados en estructuras excesivamente centralizadas, lo que limita el ejercicio democrático interno. “Algunos tienen una autoridad formal, pero no es la que decide; y en otros, deciden una o dos personas”, señaló.
Agregó que el incumplimiento de promesas de gobierno acentúa la desconfianza ciudadana. “Cuando un gobierno ofrece y no cumple, se constata que las elecciones solo sirven para elegir a un nuevo partido que gobierne, sin resolver los problemas de fondo”, expresó.
Problemas estructurales
Castellanos también hizo referencia a la precariedad en los servicios básicos. “Todos los días se publican listados de sectores donde no habrá fluido eléctrico, lo que limita la prestación de servicios esenciales y aumenta la inconformidad social”, advirtió.
Sobre el sistema de salud, apuntó que continúa siendo uno de los grandes retos para cada administración, tanto por el incremento de la demanda como por el alza en los precios de medicamentos.
En materia económica, destacó que el desempleo sigue creciendo, en parte debido al cierre de más de 1,200 empresas en el último período, lo que ha reducido significativamente el empleo formal.

















