Tegucigalpa.- La socióloga Julieta Castellanos analizó la situación económica y social de Honduras, destacando que el país aún no ha creado las condiciones adecuadas para atraer inversión extranjera.
«Para que haya inversión extranjera y desarrollo, es fundamental generar confianza. Los países deben garantizar seguridad jurídica, para que los inversores sepan que sus recursos están protegidos y que podrán operar sin interferencias, ni instrumentalización.
Asimismo, destacó que la seguridad ciudadana, la gobernabilidad y la capacitación de la fuerza laboral son factores clave para el crecimiento económico. Sin embargo, Honduras ha fallado en estos aspectos, lo que la mantiene en una condición de alto riesgo para la inversión.
Castellanos también analizó el impacto de las políticas sociales en la economía del país, señalando que Honduras ha dependido de préstamos para financiar programas de asistencia. «Las políticas sociales significan la distribución de recursos, pero en Honduras son recursos que no existen. Para sostenerlas, el país se endeuda con organismos internacionales», explicó.
La socióloga comparó esta situación con la de otros países que financian sus políticas sociales con ingresos propios provenientes de impuestos o empresas estatales. «En Honduras, los ingresos únicos del Estado son tributarios y resultan insuficientes incluso para cubrir el gasto corriente.
El problema, según Castellanos, radica en que la deuda contraída para programas sociales se vuelve una carga permanente. «Los préstamos se deben pagar y terminan afectando el Producto Interno Bruto (PIB), convirtiéndose en un círculo vicioso», dijo.